'En todo el mundo hay miles de millones para gastar en el tren'
Ingeniero, de 53 años, ha ocupado el arranque de su carrera en puestos de alta responsabilidad de las principales empresas mundiales del automóvil. En 2003 cambió de sector y fue nombrado presidente de Alstom Transporte, cargo al que un año más tarde añadió la vicepresidencia ejecutiva de la multinacional de origen francés
El actual número uno de la división de transporte de la multinacional que reinventó en Europa el ferrocarril en los años setenta del siglo pasado con el lanzamiento del TGV asegura que el tren es la alternativa de futuro para el avión y la carretera. En un más que correcto español aprendido en México, Philippe Mellier afirma que los Gobiernos y Estados de todo el mundo han comprometido miles de millones en planes y proyectos que permiten la recuperación del ferrocarril como el medio de locomoción más importante, también en el siglo XXI.
Corren vientos de crisis en algunos sectores económicos de España y del mundo. ¿Está también en crisis el ferrocarril?
En el tren no se puede hablar de crisis y menos en estos momentos. Los proyectos ferroviarios siempre se plantean con plazos de ejecución de unos cinco años y si hay una zona que está en dificultades o concluye un proceso inversor, siempre toma el relevo otra que desarrolla nuevas infraestructuras y adquiere material. Si flojea la alta velocidad, aparecen iniciativas de metro o de trenes de cercanías o regionales. En Alstom tenemos pedidos en estos momentos para seguir trabajando sin descanso durante 30 meses.
'En España hay buenas expectativas, pero los contratos ahora son de equipos de infraestructura'
'Alstom, a diferencia de sus competidores, posee producto para cualquier servicio'
En un momento en que la construcción de viviendas privadas cae, ¿la alternativa es la inversión pública, por ejemplo, en el AVE?
Tenemos que hablar de una realidad menos coyuntural. El tren es el transporte del futuro. Todos los países y gobiernos del mundo están haciendo una apuesta decidida por el ferrocarril, que vive un auténtico renacimiento. Hay milles de millones comprometidos en esta apuesta. ¡Hasta en Estados Unidos es la alternativa al avión y al coche! Ahora mismo estamos pendientes de que una votación en el Estado de California para construir una línea de alta velocidad.
Pero los proyectos ¿tienen presupuestos suficientes y ciertos?
Durante algunos años había planes, pero no había dinero. Ahora hay muchísimo dinero para invertir en el tren. En Francia están planteados dos o tres contratos que ponen en juego varios miles de millones de euros. En Alemania, Reino Unido, India, Latinoamérica y norte de África; las licitaciones y los proyectos apoyan la promoción de líneas y servicios de alta velocidad, de cercanías, regionales, tranvías y metros. China tiene un gran programa de inversiones, pero es un mercado menos abierto.
En países terceros, Alstom, Siemens y Bombardier compiten a cara de perro, pero en los grandes contratos que se van a disputar en Francia o en Alemania las adjudicaciones tienen un componente muy proteccionista.
Ese es un escenario que se daba en el pasado. Alstom sólo ha suministrado el 50% de los trenes que circulan en Francia y, por el contrario, nuestra principal planta de fabricación se encuentra en suelo alemán.
En España se están completando los pedidos para las primeras fases que contemplaba el PEIT. Ahora ¿hay que esperar?
El mercado español ha sido uno de los más activos durante años con importantes pedidos. Ahora también hay muy buenas perspectivas, porque no hay que pensar siempre en la alta velocidad o en la compra de trenes. Está abierto un concurso para suministrar material para el metro de Madrid. También está en marcha la licitación de la señalización ERTMS y la electrificación de la nueva línea de alta velocidad entre Madrid y Valencia. Renfe convocará una ampliación del parque de Cercanías.
La fabricación de trenes es la parte del león del negocio.
En nuestro caso es el 55% de la facturación. A diferencia de nuestros competidores, Alstom tiene presencia en todos los segmentos de equipamientos necesarios para poner en marcha y mantener la calidad de una línea férrea o un servicio. La electrificación, la señalización, el trabajo de mantenimiento de trenes supone casi la mitad del negocio.
Alstom no salió muy bien parado en las grandes adjudicaciones que ha realizado Renfe durante los últimos ocho años para comprar los AVE de muy alta velocidad.
Como consecuencia de algunas decisiones en la compra de trenes en España, el suministro han sufrido retrasos considerables. El 70% de los trenes de muy alta velocidad que han comprado las compañías de tren en todo el mundo son de Alstom. Nuestra tecnología es la mejor referencia.
El nivel de inversiones previstas para los próximos años en España ¿pone en cuestión el futuro de la fábrica de Barcelona?
Nuestra presencia en el tejido industrial español es sólida. El cumplimiento de los pedidos en curso y las licitaciones que están en marcha son sólo una parte de la actividad de la planta de Santa Perpetua. Desde hace ya muchos años dedica una parte muy importante de su esfuerzo a la exportación. Ahora suministra unidades al Metro de Londres y hará lo mismo con el Tranvía de Orán.
Un tren veloz de dos pisos a 350 kilómetros hora
Philippe Mellier ha visitado España esta semana con el objetivo de compartir con los trabajadores de la filial nacional un discreto aniversario que, sin embargo, se ha convertido en importante para la multinacional. Hace ahora 15 años Alstom comenzó en Toledo su hoy próspero negocio mundial de mantenimiento de trenes, atendiendo a las peticiones de Renfe para dar el mejor trato a los 22 trenes AVE que había suministrado en 1991 para la línea veloz de Madrid a Sevilla.Mellier participó en un encuentro en el taller manchego y señaló que, como desarrollo de aquella primera actividad, Alstom ha firmado importantes contratos en los cinco continentes y el último es para mantener a punto a 500 locomotoras en Estados Unidos, la mayoría de ellas de marcas diferentes a la de la multinacional.El directivo, durante la entrevista con este diario, evitó pronunciarse sobre los resultados que presentará Alstom en relación con el pasado ejercicio ya que se darán a conocer oficialmente en las próximas semanas. Afirmó, sin embargo, que la salud económica de la empresa 'es muy buena' y cuenta con tesorería suficiente como para participar en algún proceso de compra, una vez que en el próximo mes de julio finalice el plazo de carencia para hacer adquisiciones impuesto en el plan de rescate de la compañía que le permitió salir de una profunda crisis en el año 2003.Mellier presumió de la nueva tecnología de trenes desarrollada por Alstom que fue presentada con la composición más veloz del mundo, el prototipo AGV, y señaló que sus próximos retos en innovación se centran en hacer un tren veloz de dos pisos capaz de correr a 350 kilómetros hora.