Caja Navarra limita al 15% la participación de cargos públicos en su consejo
Caja Navarra (CAN) ha elaborado un código de buen gobierno que contiene 41 recomendaciones, entre las que destaca la que limita al 15% el porcentaje de integrantes del consejo de administración y de la comisión de control 'que en el momento de su elección por el consejo general, ostenten un cargo público-político'.
Esta limitación no afecta, sin embargo, a los miembros natos, que por tanto no se designan, y que son el presidente de la comunidad Navarra y presidente de la caja, Miguel Sanz, y la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina.
En la actualidad, los estatutos de CAN permiten la presencia de hasta un 50% de cargos públicos, pero en este momento, y de nuevo sin tener en cuenta a los dos miembros natos, en el consejo hay un 15% de cargos públicos y no existe ninguno en la comisión de control.
El código de buen gobierno aclara que con su recomendación de que no se supere el 15% de cargos públicos se pretende profesionalizar la figura de los consejeros. Por eso, otra de las sugerencias es que las propuestas de candidatos al consejo y a la comisión deban ser motivadas en función de la experiencia y la preparación técnica para el cargo.
También se recomienda que se publique el perfil profesional y biográfico de los consejeros y que se aclare el grupo de representación al que pertenece así como el procedimiento por el que accedió al consejo.
La entidad se ha propuesto además elaborar y publicar anualmente, junto a su informe de gobierno corporativo preceptivo por ley, un informe explicativo del grado de cumplimiento de las recomendaciones del código de buen gobierno que acaba de aprobar.
El documento enumera además los deberes de los consejeros (diligencia, dedicación, información, lealtad, conflicto de intereses o secreto incluso después de cesar en sus funciones) y hace hincapié en el deber de actuar en beneficio del interés de la caja, independientemente del grupo o sector de procedencia. El código recomienda asimismo que en los casos de dimisión se expliquen por escrito las razones que han conducido a tomar esa decisión.
La entidad auditará anualmente el proceso de elección por parte de los clientes del destino de los fondos que se asignan a acción social