La complicada semana de Sacyr
El grupo pierde un 10,2% de su valor en Bolsa entre rumores y pendiente de Francia
No vender, pese a la esquizofrénica semana padecida. Sacyr está diez puntos por debajo de su precio objetivo de consenso (28 euros), y conservaría así un interesante margen de recorrido. El consenso de analistas de FactSet aconseja tener paciencia con el valor pese a su difícil semana. Discrepan de esa posición ING, que rebaja su recomendación a mantener, e Ibersecurities, que invita a vender. La compañía se ha dejado en Bolsa un 10,2% de su valor en sólo cinco sesiones. En lo que va de año, retrocede un 31,8%. ¿Ha tocado suelo?
Dos asuntos colean en Sacyr. Por un lado el contencioso por la opa sobre la francesa Eiffage, cuyos accionistas minoritarios reclaman que se obligue a Sacyr a lanzar una opa por el 100%, que resolverán los tribunales parisinos el próximo 2 de abril. Y por otro el pintoresco caso del bulo sobre una inminente suspensión de pagos, desmentido por la compañía y atribuido a causas electoralistas. En este contexto, los expertos auguran beneficios pese al alterado escenario que pisa uno de los grupos más endeudados del parqué español. Sacyr cerró 2007 con una deuda de 19.726 millones de euros, un 7,45% más que en el ejercicio precedente.
Y para muestra de su inestable camino bursátil, un botón. Los títulos de la constructora que preside Luis del Rivero -su máximo accionista con 13,75% -oscilaron ayer de los 17,37 a los 18,31 euros por acción. Una horquilla, del rojo intenso al apagado, que le llevaba a dejarse un 2,33% durante la mañana para remontar por la tarde y cerrar con un ligero retroceso del 0,06% en 18,14 euros. Una variación que quizá tenga que ver con las recomendaciones de los analistas tras una semana vertiginosa. Sacyr empezó perdiendo el 6,93%, el lunes. Los rumores sobre una posible suspensión de pagos, que habría sido anunciada por SMS a algunos trabajadores de la empresa empujaron el valor a su nivel más bajo desde agosto de 2005 (17,72 euros). El mensaje acusaba al PSOE de pagar para retrasar dicha suspensión hasta después de las elecciones. Cayó el 6% el martes y, tras el rotundo desmentido público de la compañía, subió en la misma proporción. Sacyr ha dejado el asunto en manos de los tribunales. El jueves el retroceso se quedó en un, por entonces, amable 3,20%. Una carrera al mejor estilo bursátil. Volatilidad en estado puro.
El caso es que el valor lleva largo rato dando muestras de agotamiento. Expuesta al parón del sector constructor en España, al que se vincula el 27% de su valor, el grupo acarrea un endeudamiento desproporcionado que condiciona la visión de la compañía, según define Inverseguros. La compañía, que presentó resultados el lunes, obtuvo un beneficio de 946 millones de euros en 2007, con un aumento del 74,5%. Ahora bien, las ganancias cayeron el 25% en el último trimestre. Inverseguros vincula cualquier recuperación de la compañía a dos hechos: 'La colocación exitosa de su filial de infraestructuras Itinere y la salida de Eiffage, intentando minimizar el coste'. La batalla de Sacyr se librará en los tribunales.