El Guipuzcoano se repliega y congela la apertura de oficinas
Prudencia, congelación en la política de apertura de oficinas y menor beneficio. El Banco Guipuzcoano va a poner en marcha un plan estratégico de choque en los próximos dos años para estar preparado 'cuando mejore la coyuntura económica'
Balance saneado, poca exposición al riesgo inmobiliario y una gestión adecuada. El dibujo actual de Banco Guipuzcoano, realizado por su presidente, José María Aguirre González, es el que se pretende mantener. Y, para ello, ha redefinido su estrategia con el objetivo de encontrarse el banco 'en perfecto estado' para cuando vuelvan a estabilizarse los mercados financieros 'y mejore la coyuntura'.
La entidad bancaria, que el viernes celebró su junta general de accionistas en San Sebastián, asegura contar con las recetas necesarias para solventar la 'crisis' que envuelve a los mercados. A partir de ahora, Banco Guipuzcoano va aplicar una política de 'limitación' en el crecimiento del crédito y una decidida 'lucha' contra la morosidad.
Este capítulo, se duplicó en 2007 al pasar la tasa de impagados de un 0,6% al 1,2%. El aumento de esta ratio, que se concentró principalmente en los préstamos hipotecarios, le obligó a realizar dotaciones por 70 millones, nueve millones más que el beneficio neto conseguido el pasado ejercicio.
El nuevo plan de choque a dos años, denominado Proa al 10, tendrá como principales líneas de actuación el repliegue de su expansión con una 'congelación' en la política de apertura de oficinas. También supone una revisión a la baja de los beneficios netos previstos que, en 2008, subirán sólo el 5,6%, y el 6,5% en 2009, según su director general, Juan Luis Arrieta. Este año el margen de intermediación se incrementará un 3,9%, mientras que está previsto que el ordinario repunte un 3,5%. Además, se destinarán 42,2 millones a dotaciones y provisiones.
Banco Guipuzcoano cerró 2007 con un beneficio neto de 61,5 millones, un 13% más que en 2006, y con 266 sucursales. Su plantilla ascendió a 1.300 personas. En 12 meses, la cotización descendió un 11%.
El relevo de Aguirre será un actual consejero
El relevo de José María Aguirre al frente de Banco Guipuzcoano será, en principio, tranquilo. El actual presidente de la entidad financiera con sede en San Sebastián se jubilará en abril de 2009 al cumplir los 70 años, edad máxima que marcan los estatutos para tener un puesto en su máximo órgano de gobierno. Según Aguirre, el nuevo presidente procederá del propio consejo. Juan María Muguruza, actual vicepresidente también abandonará la vicepresidencia. José María Aguirre, hijo del que fuera presidente de Banesto y de la constructora Agromán, José María Aguirre Gonzalo, accedió a la cúpula del Guipuzcoano hace 20 años. En este periodo ha visto como BBK y Kutxa se han convertido en sus socios de referencia.