La contratación de futuros se dispara por la gran volatilidad
Los bruscos movimientos de la Bolsa han disparado la volatilidad en 2008, lo que favorece la negociación de productos derivados. La contratación de futuros sobre el Ibex 35 crece un 32,4% en lo que va de año, frente al 5% que se elevó en diciembre.
No todos los inversores sufren con los erráticos movimientos de los mercados, también hay algunos que se benefician. 'Los vaivenes de las Bolsas constituyen una oportunidad de ganar dinero a corto plazo', señala Enrique Martí, director del área de inversores particulares de Interdin.
En lo que va de 2008, la volatilidad media del Ibex 35, que mide la desviación típica del índice sobre su tendencia general, se sitúa en el 29,1%, lo que supone un incremento del 52% respecto al 19,1% del año pasado. El nivel máximo se marcó a los dos días del crac bursátil del 21 de enero, con un 38,4%.
Así, después de la desaceleración de diciembre del año pasado, cuando el número de contratos negociados sobre el Ibex 35 creció un leve 5% frente al mismo mes de 2006, el negocio de futuros ha experimentado un fuerte crecimiento en enero y lo que va de febrero. Se ha incrementado un 32,4% respecto al mismo periodo del año pasado, hasta alcanzar los 1,86 millones de contratos a día 21 de este mes, según datos de MEFF.
Este hecho contrasta con la reciente apatía en la negociación del contado. Hasta el viernes, el volumen en renta variable había caído un 7,7%, hasta 80.600 millones de euros, respecto al periodo comparable de 2007.
La incorporación de nuevos inversores a este mercado, especialmente minoritarios, también está alimentando el crecimiento, según revela la negociación del contrato Ibex Mini, diseñado especialmente para dicho segmento. La contratación de este producto, en el que cada punto del índice supone un euro en lugar de los 10 euros de su hermano mayor (véase apoyo), crece un 73,9% en 2008, hasta los 536.980 contratos. En cualquier caso, el volumen del Ibex Plus, dirigido a los grandes inversores -que son los más activos en esta operativa-, también se ha incrementado notablemente, un 20,7%, hasta 1,32 millones. De esta forma, tras el receso de finales de 2007, se regresa a la tendencia de crecimiento del mercado español de futuros sobre el índice (tanto Mini como Plus), cuya tasa media anual de incremento es del 16,1% desde 2000 (véase gráfico). Los futuros son una de las herramientas más utilizadas para poder ganar dinero con las caídas del mercado, una posibilidad que no ofrece la operativa al contado. Eso sí, también implican un gran riesgo, debido a su elevado nivel de apalancamiento.
Sobre acciones
Los futuros sobre acciones también van logrando hacerse un hueco en las carteras de los ahorradores desde su lanzamiento, allá por 2001. Desde entonces, se han ido incorporando nuevos subyacentes, de tal manera que actualmente hay futuros sobre todas las compañías del Ibex 35 y, desde octubre del año pasado, también sobre 40 firmas de otras Bolsas europeas.
Estas nuevas incorporaciones han provocado un alza del 460% en la negociación de los futuros sobre acciones en lo que va de año, hasta situarse en 3,51 millones de contratos. Por cada uno de ellos, se apuestan 100 títulos de la compañía en cuestión, si bien la garantía que se exige es muy inferior, de entre el 15% y el 25% de su coste real. El principal problema de este producto radica en su falta de liquidez.
De esta forma, y también dirigidos a los minoritarios, están llegando nuevos productos derivados al mercado español, como los contratos por diferencias (CFD, por sus siglas en inglés). 'Su principal ventaja es que gozan de la misma liquidez que las propias acciones', señala Enrique Martí. Por su parte, Daniel García Rojí, responsable de clientes privados de IGMarkets, explica que la actual coyuntura de intensa volatilidad está elevando la demanda de CFD: 'Enero y febrero serán récord tanto de volumen como de corretajes'.
Cómo se usan
Versatilidad. Al vender o comprar un contrato Ibex Plus se apuesta -a la baja o al alza, respectivamente- por el equivalente en euros a los puntos del índice multiplicados por 10: 130.170 euros según el cierre del viernes (cada punto vale 10 euros). Si se vendió y Ibex cae a 12.500, la ganancia sería de 5.170 euros, y si sube a 13.500 puntos, la pérdida sería de 4.830 euros. La garantía es de 10.000 euros. En el Ibex Mini, el multiplicador es de un euro y la garantía, de 1.000 euros.