El déficit comercial aumenta al ritmo más lento en cuatro años

El déficit comercial creció un 10,3% en 2007, el nivel más bajo en cuatro años. La diferencia entre exportaciones e importaciones rozó los 99.000 millones de euros, lo que supone el 9,4% del PIB. El sector exterior restó siete décimas de crecimiento al PIB, cinco menos que en 2006.

La economía española sigue perdiendo competitividad por el deterioro del sector exterior. El saldo de la balanza comercial (diferencia entre los bienes y servicios que vende y compra España en el exterior) alcanzó en 2007 un nuevo récord al rozar los 99.000 millones de euros, lo que supone un 10,3% más que en 2006. Pese a que es el incremento más bajo de los últimos cuatro años, el déficit comercial ya representa el 9,4% del PIB.

Pero no todos los indicadores son malos. El saldo comercial, aún siendo muy abultado, ha ido reduciendo progresivamente su tasa de crecimiento desde el 30,8% registrado en 2004, lo que ha contribuido a que la aportación negativa del sector exterior sea cada vez menor. En 2005 restó 1,7 puntos al producto interior bruto, en 2006 la cifra se redujo a 1,2 puntos y en 2007 bajó a 0,7. Los analistas consultados coinciden en que este fenómeno no se ha producido por un mayor vigor del sector exterior, sino por una ralentización de las importaciones. Ese menor ritmo ha venido provocado a su vez por el menor consumo de familias y empresas ante la desaceleración de la economía.

Lo que no ha cambiado ha sido la fuerte concentración de los intercambios comerciales con la zona euro, que sigue siendo el primer socio de España, y el alto coste que representa para España la compra de productos energéticos para suplir la ausencia de fuentes para autoabastecerse.

A la zona euro llegan el 55,9% de las exportaciones españolas y de los socios comunitarios llegan el 49,3% de las importaciones españolas. Sólo Francia y Alemania absorben el 29% de lo que vende y lo que compra España en el extranjero. Este hecho es un riesgo añadido en una coyuntura como la actual, en el que la crisis de crédito derivada de las hipotecas de alto riesgo en EE UU ha provocado una desaceleración en esas dos economías y al mismo tiempo un impacto negativo en los intercambios españoles con esos dos países.

Dependencia energética

Para diversificar los riesgos, el Ejecutivo ha impulsado planes de desarrollo en 11 países considerados prioritarios para el sector exterior. Las exportaciones a esos países ha crecido un 11,5%, casi el doble que el total de las importaciones. Entre ellos destaca Rusia, con un alza del 38,2% en tasa interanual, y La India, con una subida del 37,4%.

Sin embargo, estos países siguen siendo más vendedores que compradores, por lo que su aportación al saldo comercial español sigue siendo negativa. Las ventas a esos destinos suman 26.344 millones de euros, apenas un 14% del total de las exportaciones, mientras que las compras rozan los 66.000 millones, es decir, el 23,3% de las importaciones españolas. El saldo negativo para España es, por lo tanto, de 39.000 millones.

La fuerte dependencia energética de España (compra más del 80% de la energía que consume) es el principal lastre de la balanza comercial. De los 98.952 millones de déficit comercial, un 30% (33.193 millones) procede de las compras de productos energéticos como petróleo, gas, carbón o electricidad. La fuerte revalorización del euro frente al dólar (la divisa en la que se compra el crudo) no ha servido para compensar las fuertes subidas de precios del petróleo, que llegó a tocar los 97 dólares en 2007.

En el lado de las exportaciones, los bienes de equipo, que suponen la partida más importante de las ventas españolas en el extranjero (el 21,6% del total), crecieron tan sólo un 4 ,4% frente al 6,8% del total. En esta desaceleración ha tenido mucho que ver la fuerte caída de las exportaciones de maquinaria de oficina y equipos de telecomunicaciones, que sufrieron bajadas cercanas al 30% en 2007, que prácticamente neutralizaron los avances en las exportaciones de maquinaria y material de transporte, que crecieron por encima de dos dígitos.

La opinión de los analistas

 

Funcas

El director del gabinete de coyuntura de la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas), Ángel Laborda, asegura que la economía española seguirá perdiendo dinamismo, al igual que en 2007, y prevé que el crecimiento medio del PIB se situará en el 2,5% en 2008. 'La desaceleración se va a producir por los mismos motivos, aunque se agravará por la menor disponibilidad de crédito y el hecho de que este va a ser más caro'.A su juicio, esta restricción repercutirá a los hogares y a la inversión industrial, 'que ya se vieron afectados en 2007 por el repunte de la inflación y de tipos de interés'.

Cámaras

El Consejo Superior de Cámaras de Comercio valora el dinamismo con el que ha crecido la economía en 2007, aunque no lo tiene tan claro respecto a cómo lo hará este año. 'La evolución durante los próximos meses es especialmente sensible al desarrollo de los riesgos presentes a escala internacional, como la crisis financiera, los precios de las materias primas o la desaceleración en Estados Unidos', apunta en una nota.

Caixa Catalunya

El director del servicio de estudios de Caixa Catalunya, Xavier Segura, pronostica que la desaceleración de la economía española seguirá en 2008, aunque eso no impedirá que crezca un 2,5%, 'una subida tenue, pero por encima de los países de nuestro entorno', asegura. Segura cree que el consumo de los hogares va a sufrir un frenazo, que se agudizará por el alza de la inflación, que cerrará 2008 con una media del 3,3%, y por una menor capacidad de creación de empleo. Asimismo cree que la desaceleración mundial afectará al sector industrial, en especial a los bienes de equipo.

AFI

El menor vigor de la demanda interna, que crecerá en 2008 la mitad que en 2007, se verá compensado en parte por la recuperación del sector exterior, según Carlos Maravall, responsable de análisis macroeconómico de Analistas Financieros Internacionales (AFI). Estima que el sector exterior tan sólo restará dos décimas de crecimiento al PIB, que crecerá un 2,4% en 2008, según sus previsiones.

China y Alemania, los dos grandes desajustes de España

Alemania y China son los dos grandes responsables de que el déficit comercial de España crezca a ritmos superiores al 10% en los últimos años.De los 98.952 millones de euros, 22.948 (el 23,1% del total) corresponden a Alemania, mientras que 16.583 (el 16,5%) corresponde a China. Las ventas a España se han acelerado en ambos casos. Las exportaciones alemanas crecieron un 15,1% por la mayor demanda de la industria española de bienes de equipo y de los automóviles. En el caso de China, cuyas ventas a España crecieron un 30,4%, los sectores de manufacturas (textil, calzado o juguete) han protagonizado las subidas más elevadas.

Tasa de cobertura

La tasa de cobertura de las exportaciones, que mide el porcentaje de importaciones que se pueden cubrir con las exportaciones, se situó en el 64,7%, el nivel más bajo de los últimos cuatro años y casi seis puntos menos que en 2004.