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Cumbre hispano-alemana

Zapatero y Merkel piden a la UE que adopte medidas anticrisis

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la canciller alemana, Angela Merkel, reclamaron ayer durante la celebración de la cumbre hispano-alemana que ante una 'cierta desaceleración económica' la UE debe apostar por nuevas medidas y más transparencia para prevenir los problemas.

Ambos mandatarios presidieron en Palma de Mallorca la XXI cumbre bilateral, en la que la economía, la cooperación contra el terrorismo y el cambio climático fueron el argumento de buena parte de las sesiones de trabajo.

Ante las turbulencias de los mercados financieros y su impacto en la economía europea, Zapatero insistió en que hay una consideración compartida de que el origen del problema está en EE UU.

El presidente del Gobierno señaló que ambos coinciden en que la consecuencia de los problemas en esos mercados será 'una desaceleración económica' que la Unión Europea debe abordar de forma muy decidida.

Y para ello, tanto el jefe del Ejecutivo español como la canciller alemana defendieron 'nuevas medidas, mayor información, más transparencia y una mayor regulación a la hora de prevenir y anticipar los problemas en el sistema financiero'.

Merkel se limitó a señalar que hay un 'alto grado de coincidencia' sobre la situación económica mundial y elogió el crecimiento económico de España y el superávit de sus cuentas públicas. De hecho, recordó que su país aún no ha conseguido obtener superávit. Zapatero aseguró que las relaciones hispano-alemanas atraviesan un momento muy positivo y se refirió a la colaboración existente en diversos ámbitos, como el relativo al cambio climático y las energías renovables, ante el que aseguró que los dos países están totalmente comprometidos. En este sentido, acordaron poner en marcha en África proyectos conjuntos para promover el uso de dichas energías por ser la región del mundo que más va a sufrir el cambio climático.

Fuentes gubernamentales indicaron a Europa Press que esta cooperación se estrenará en Mali. æpermil;ste es el único resultado concreto y hecho público de una cumbre bilateral en la que no estaba prevista la firma de ningún acuerdo bilateral.

Ante el proceso de negociación con Turquía para su adhesión a la UE, Zapatero defendió que se respete el mismo, mientras que Merkel subrayó que hay caminos abiertos y otros 'aún por abrir'.

El apoyo a Rajoy y la elección de Palma

La cumbre celebrada en Palma entre delegaciones de los Gobiernos de España y Alemania discurrió en un clima de cordialidad. Tanto es así, que Zapatero y Merkel consideraron normal el deseo 'de todo corazón' expresado el miércoles por Merkel al líder del PP, Mariano Rajoy, para que tenga éxito en las elecciones del 9 de marzo. De esta forma, separaron su pertenencia a familias políticas distintas de la colaboración bilateral como jefes de gobierno. Los elogios y bromas se sucedieron al hablar del lugar elegido para la cita. Zapatero destacó que Baleares es el mejor sitio para celebrar una cumbre hispano-alemana debido a la presencia de compatriotas de Merkel, bien como turistas (cuatro millones al año) o residiendo en ellas (30.000), por lo que concluyó que la canciller 'jugaba en casa'.

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