Las familias destinaron el 46,2% de su renta a financiar la compra de vivienda en 2007
Las familias españolas destinaron el 46,2% de su renta bruta disponible a financiar la compra de vivienda en 2007, tres puntos y medio más que al cierre de 2006 y la cifra más alta de toda la serie histórica, según los últimos datos del Banco de España.
Los datos de la autoridad monetaria indican que el endeudamiento de los hogares por la compra de vivienda continúa creciendo de forma paulatina, dado que en el primer trimestre, las familias destinaron el 43,3% de su renta a financiar la adquisición de vivienda, el 44,2% en el segundo trimestre, el 45,4% en el tercero y el 46,2% en el último trimestre del año.
A pesar del menor incremento de los precios de la vivienda al final del ejercicio, el Euríbor, tipo al que se conceden la mayoría de las hipotecas en España, se situó en diciembre de media en el 4,793%, su nivel más alto desde diciembre de 2000, con lo que retomó la tendencia al alza de este indicador, que se vio interrumpida por los descensos de octubre y noviembre, después de acumular dos años de continuas subidas.
Sin embargo, el precio medio de la vivienda libre se situó en 2.085,5 euros por metro cuadrado al cierre de 2007, lo que supone un incremento del 4,8% respecto al año anterior, el nivel más bajo de la última década, según el Ministerio de Vivienda.
Con todo, el aumento del esfuerzo financiero de los hogares por compra de vivienda está en línea con el aumento del importe medio de las hipotecas. Hasta octubre (último dato disponible), dicho importe se situó en 150.851 euros, lo que supone un incremento del 5,5% respecto al mismo mes de 2006, según la estadística de hipotecas del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Una vivienda cuesta siete veces la renta disponible
De esta forma, en el tercer trimestre del año el precio de una vivienda de tipo medio (93,75 metros cuadrados) era 7 veces superior (7 veces en 2006 y 6,7 veces en 2005) a la renta bruta disponible de un hogar mediano.
Descontando las deducciones de las que se benefician las familias por compra de vivienda a través del IRPF (un 15% con carácter general hasta un máximo de 9.015 euros anuales), los hogares destinaron el 37% de su renta bruta disponible a financiar la adquisición de su vivienda en 2007, cifra superior al 29,9% que fue necesario en el 2006.