Alemania rompe la buena imagen de Nokia
El cierre de su fábrica alemana la desgasta demasiado
Se imagina que los ministros españoles dejaran de utilizar de un día para otro vehículos Opel o Seat o componentes para vehículos fabricados por Delphi? ¿Se imagina que la oposición le sigue el juego en plena campaña política y asegura que nunca jamás entrará en su casa ninguno de esos automóviles porque ya no se fabrican en España? Pues eso es exactamente lo que está ocurriendo en Alemania desde que la semana pasada la compañía Nokia, la mayor fabricante de móviles del mundo, anunciara su intención de cerrar su planta de Bochum (al oeste de Alemania) por no resultar rentable y decidiera trasladar su producción a Rumanía dejando a 2.300 empleados sin trabajo.
Desde entonces, a la empresa finlandesa no ha parado de lloverle críticas de diferentes políticos alemanes. Primero fue el socialcristiano bávaro Horst Seehofer, ministro de Consumo, Agricultura y Pesca. Anunció que sus funcionarios estudian vías legales para retirar los móviles finlandeses en todo el ministerio. Al mismo tiempo el jefe del grupo parlamentario socialdemócrata (SPD) en el Bundestag, Peter Struck dejaba de utilizar su N-95. El ministro de Finanzas, Peer Steinbrück, fue más claro al afirmar que el consorcio finlandés realizaba 'capitalismo de caravana' porque recogía subvenciones y se marchaba a otro lugar.
La unión contra el enemigo finlandés quedó patente este fin de semana en plena campaña electoral por las regiones de Hesse y Baja Sajonia. La canciller alemana, Angela Merkel, aseguró que ve comprensible el boicot a la compañía de móviles. Por su parte, el candidato a canciller y líder del gubernamental del Partido Socialdemócrata (SPD) Kurt Beck aseguró: 'Un móvil de Nokia ya no entrará en mi casa'. Tajante.
La finlandesa se la juega en el quinto mercado más importante
El último en sumarse al boicot no es un político. El movimiento antiglobalización Attac Finlandia pidió ayer que se 'reflexione sobre el uso de los productos Nokia'. Attac asegura que la deslocalización de Nokia es una prueba del capitalismo más 'inhumano'. Con esta campaña de 'concienciación' Attac intenta que los alemanes no compren móviles Nokia. Alemania es el quinto mercado más importante para la empresa de telecomunicaciones en cuanto a ventas, después de China, EE UU, India y Reino Unido.
Nokia se mantiene firme
Por el momento la empresa finlandesa ha decidido guardar silencio excepto para asegurar que su decisión de trasladar la producción a Rumanía no va a cambiar. Fuentes de Nokia informaron que a partir de hoy tendrán una postura 'más detallada' al respecto.
En medio del revuelo, la dirección del grupo Nokia recibió ayer en Berlín a representantes del comité de empresa y los sindicatos germanos para tratar sobre cierre de su planta.
El comité de empresa de la factoría de Nokia en Bochum y los sindicatos han convocado para hoy una manifestación en la localidad industrial alemana para defender el mantenimiento de la planta. Mientras, en Bochum, también esperan las cuentas de la empresa que se harán públicas el próximo jueves.
¿Dónde es más barato producir?
El DGB, el sindicato más poderoso de Alemania, dijo en la televisión germana que es igual de económico producir en Alemania que en Rumanía. Sin embargo, según datos de la Unión Europea el coste medio de la mano de obra por hora en 2006 era de 32 euros en Alemania, mientras que en Rumanía era de sólo 2,45 euros. Nokia ha argumentado, como razón para trasladarse a Cluj,que los costes de producción son diez veces más bajos en Rumanía que en Alemania.Mientras, el alcalde de Cluj, Dorel Pojar, propuso ayer una solución para los empleados de Bocham: que se trasladen a trabajar a Rumanía. Eso sí, con un salario diez veces inferior que el que cobran en su país natal. 'Al igual que nosotros vamos a trabajar a Alemania pueden venir ellos a trabajar a Rumanía' sentenció. Por el momento la compañía finlandesa ha contratado a 1.000 personas y espera dar empleo a 3.500 trabajadores hasta 2009.