Las empresas españolas llaman al número de la telepresencia
Al menos 20 salas con este servicio serán instaladas durante 2008
El teletransporte de Star Trek es ciencia ficción, pero la telepresencia sí es real, y ya ha llegado a España. Cisco Systems ha comercializado ya seis salas con este servicio de comunicación a clientes como Telefónica, en su sede de Las Tablas (a la que se añadirán más en otros países donde está presente), Accenture en sus oficinas de la Torre Picasso, Media Markt Saturn en Barcelona (cuya matriz empezó comprando dos y ahora va a llegar a 15 en todo el mundo) y algunos de los principales bancos españoles. Constructoras, farmacéuticas y cadenas minoristas serán las siguientes. Cisco cuenta con una de estas salas en su sede de Alcobendas y pronto podría instalar otra más.
Para este despliegue, Cisco cuenta con el apoyo de Unitronics, su primer instalador certificado para telepresencia. Esta firma cuenta ya con tres salas en Madrid y Barcelona, destinadas a uso interno y como muestra para clientes. 'A final de año, las empresas españolas podrían contar ya con una veintena de salas', indica Manuel No, consejero delegado de Unitronics, quien añade que un centenar de compañías usa este servicio en todo el mundo. 'Suelen ser firmas con muchas sedes o alto grado de internacionalización', afirma.
José Manuel Petisco, director general de Cisco Systems España, deja claro que la telepresencia no tiene nada que ver con la videoconferencia ni las videollamadas. Los clientes instalan en sus oficinas una sala con una mesa semicircular ovalada, con unas pantallas gigantes de ultra alta definición que incluyen sonido espacial, de tal manera que la voz viene exactamente del lugar donde está situada la persona que habla.
Al establecerse la comunicación, en dichas pantallas aparece otra mesa semioval que completa visualmente a la anterior. Eso sí, está en otro sitio. Desde ambos lados, los presentes establecen una reunión en tiempo real, donde la latencia es casi inapreciable, y en la que pueden intercambiarse documentos. Petisco insiste en que ayuda a mejorar la productividad de los empleados y contribuye a acelerar la toma de decisiones, lo que repercute sobre el negocio. 'Puedo reunirme con más personas en menos tiempo, en mi caso con mis colegas del sur de Europa, desde Portugal a Israel. Antes, para reunirnos teníamos que viajar, pero ahora no es necesario', dice. Aunque, también sirve para que dos empresas distintas puedan acelerar sus negociaciones sobre cualquier tipo de operación.
Reducción de costes
Además, este factor implica un gran ahorro de costes. En su uso interno, Cisco ya lo cifra en 80 millones de dólares (unos 54 millones de euros). 'Son viajes, gasto energético e incluso reducción de emisiones de CO2 al evitarse esos desplazamientos', indica Petisco. A su vez, Manuel No explica que algunas de las empresas que han decidido instalar la telepresencia han calculado que en el plazo de un año pueden recuperar la inversión.
El responsable de Unitronics señala que la instalación de una sala ronda los 300.000 euros, aunque los clientes también pueden optar por una de menor tamaño con una sola pantalla, donde el coste rondaría los 60.000 euros. Y se cuida todo. Obra civil, muebles, sillas, luz de la sala e incluso el aire acondicionado para evitar que un exceso de ruido distorsione la comunicación. La inversión también varía en función de la necesidad que tenga el cliente de ampliar o no la capacidad de su red de banda ancha. El coste por cada hora de uso puede ser de entre 100 y 200 dólares.
De igual forma, Petisco indica que las salas de telepresencia no sólo están para ser usadas por los altos directivos sino también por otros empleados de la empresa como técnicos o ingenieros que necesiten intercambiar información con sus homólogos en otras filiales. En esta línea, Manuel No explica que el uso de la sala puede llegar a ser de cuatro o cinco horas al día.
Cisco asegura que las 'turbulencias' no han afectado a su negocio
José Manuel Petisco, director general de Cisco Systems España, señala en una entrevista con CincoDías que su empresa está mirando con mucha cautela las actuales turbulencias que sacuden a la economía. 'Hay ciertas incertidumbres, pero la verdad es que estamos creciendo significativamente con respecto al año pasado. El impacto no se está viendo en nuestro negocio, del que tenemos un pulso semanal gracias a la relación que tenemos con los clientes', indica.El ejecutivo afirma que las previsiones de crecimiento de su negocio en España para este año se sitúan en el 20%, mientras que en el segmento de las pymes, el crecimiento rondará el 22%.Según Petisco, otro mercado que se está portando de manera positiva en el mercado español es el de la Administración pública, pese a la freno de la inversión por parte del Gobierno central por las elecciones. En este sentido, explica que el aumento de la inversión en proyectos de nuevas redes de IP de las Administraciones autonómicas y locales es cercano se mueve en el entorno del 25%. 'Hay ejemplos de ambiciosos desarrollos como la red Wifi de Avilés o la red IP desarrollada por Rivas Vaciamadrid para conectar todas sus instalaciones', destaca.Con respecto a las fuentes de ingresos de la empresa, el responsable de Cisco afirma que, en estos momentos, un 72% procede del mundo de las empresas y un 28% de los operadores de telecomunicaciones. En esta última área, Petisco indica que la demanda de nuevos servicios de valor añadido basados en la red sigue al alza. No obstante, admite que el despliegue de las redes de nueva generación (NGN en la terminología anglosajona) está todavía en un punto inicial. 'Nos gustaría estar más adelantados', explica Petisco.En relación a la tecnología Wimax, Petisco cree que no amenaza a la telefonía móvil, sino que más bien la complementará. 'No hay sustitución de una por la otra', comenta el directivo, quien comenta que desplegar estas redes donde hay cobertura de móvil no tiene sentido. Para el ejecutivo, Wimax será una tecnología de acceso, y no destinada al usuario final.