Las cajas terminan el año como prestamistas en el interbancario
La banca española recordará 2007 como uno de los ejercicios más complicados. La causa: la falta de liquidez del mercado. Las cajas, de hecho, se convirtieron por primera vez en septiembre en deudoras en el interbancario.
Las cajas de ahorros españolas han logrado finalizar el año como históricamente se han comportado en el mercado interbancario, prestado dinero a sus homólogos. A diciembre éstos adeudaban a las cajas 638 millones de euros netos, tras haber prestado 11.386 millones y recibir 10.748 millones, según los últimos datos del Banco de España.
Estas entidades financieras, que representan la mitad del sistema financiero español, sufrieron en septiembre un pequeño revés a su histórica posición prestadora en el interbancario, mercado en el que bancos y cajas se prestan dinero entre sí para obtener liquidez para realizar su operativa diaria.
La sequía provocada, entre otras razones por la desconfianza existente en el mercado entre unas entidades y otras, fue el detonante del giro producido en las cajas. 'Nadie se fiaba de nadie', asegura un alto ejecutivo de un gran banco español. La crisis de las hipotecas de alto riesgo estadounidenses (subprime) ha sido la causante de esta tensión, que aún no ha finalizado y se está alargando más de lo previsto por el sistema financiero internacional inicialmente.
Pese a ello, las cajas tras deber por primer vez en su historia 570 millones de euros en septiembre, han cerrado el año como prestadoras. Entre otras razones gracias a la inyección de Caja Madrid, que en octubre colocó en el interbancario los 4.000 millones de euros que ingresó por la venta de su 9,9% de Endesa. Su posición, no obstante, dista de lo que habitualmente tiene prestado en el interbancario a su favor, 638 millones frente a los 4.236 millones de un año antes, por ejemplo.
La tendencia de los bancos españoles ha sido la contraria. Frente a un mes de septiembre en el que pasaron a ser prestamistas por primera vez, han cerrado el ejercicio como deudores al registrar un saldo negativo de 2.071 millones. A ellos hay que sumar los 1.147 millones que deben los bancos extranjeros que operan en España.
A pesar de estos vaivenes el cierre del mercado interbancario español no ha sido el peor en cuanto a posición deudora de los bancos. Deben 3.218 millones, una cifra considerablemente menor a los 6.501 millones de un año antes. Aunque se aprecia que la operativa en este mercado ha sido mucho más activa que en años anteriores a partir de junio.