Agitar las conciencias desde la pantalla del ordenador
Sevilla se convierte en epicentro del fenómeno de los blog y reúne en un evento a mil participantes
Decenas de pantallas iluminadas en la enorme sala de conferencias. Y detrás de cada una, un blogger que narra personalmente lo que ocurre en ese mismo instante ante sus narices. En una de las mesas, Claudio transmite en directo con una pequeña webcam adosada a su portátil el debate del momento. Ocho personas conectadas a su blog lo están viendo. Y desde Madrid, Marcelino Madrigal, un blogger recalcitrante y peleón, confiesa: 'aquí estoy leyendo cómo va la vida por Sevilla y esas cosas'.
Casi mil bloggers, hombres (sobre todo) y también mujeres, de edades que rondan la treintena, se han reunido este fin de semana en un hotel de Sevilla para celebrar la segunda edición del Evento Blog España, el mayor congreso de estas características que tiene lugar en nuestro país. La sala por la que desfilan los ponentes es lo más parecido al éxtasis de la vida digital. Es la exaltación de un nuevo estilo de pensar, de hacer las cosas y mirar el mundo, justo el argumento que los bloggers esgrimen con más pasión al explicar su actividad.
Hay otras reuniones de aficionados a la informática o los juegos más multitudinarias todavía, como la Campus Party valenciana, sin embargo hay una diferencia fundamental con ésta. Una buena parte de los blogueros creen fervientemente en la capacidad transformadora de los blogs y el resto de tecnologías que engloban bajo la rúbrica de Web 2.0. Hay en muchos de ellos una firme decisión por cambiar la sociedad. Y la primera pista de que es un proyecto posible la tienen en su práctica cotidiana, la que les proporciona evidencias de que escribiendo en Internet están poniendo su pequeño grano de arena para transformar el mundo.
En el mundo existen alrededor de 120 millones de blogs, que crecen a un ritmo de dos por segundo. Más de dos millones se encuentran en España
Lo visto en el encuentro de Sevilla basta para desmontar el estereotipo que los dibuja con trazo grueso y sin matices como unos locos por la informática o unos ególatras. Nicolás, profesor en la cincuentena, nació en una aldea donde no había luz y ahora ejerce de bloguero para evangelizar entre sus alumnos sobre las promesas que ofrece Internet. 'La red y la participación en ella de la sociedad van a influir en la mayor parte de las instituciones', afirmaba Shel Israel, un consultor y bloguero reconocido que llegó desde Estados Unidos para realizar la conferencia inaugural. 'Podría estar ganando más dinero y más cómodamente en mi casa, pero es mucho menos divertido que esto', añadió. Otro de los insignes que desfilaron por el congreso fue el presentador Andreu Buenafuente, que desde hace tiempo mantiene su propio blog. 'Me complementa artísticamente', dijo en una charla que hizo las delicias de muchos.
Pero en mitad de la celebración del ideario bloguero no faltaron las críticas. La escasez de participación entre las mujeres se planteó en el debate, pese a que los datos indican que hay tantas como hombres en el universo de los blog. ¿Y qué pasa con la concentración empresarial que se está produciendo en Internet o con el desarrollo de nuevas leyes más restrictivas? Pese a todo, la expectativa y la firme creencia de que las cosas pueden cambiar sigue en pie. Los blogueros se han pasado tres días escribiendo sobre ello desde Sevilla.