España exige a Francia reciprocidad en el trato a la inversión empresarial
El Gobierno español, a través de la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno, que dirige David Taguas, ha exigido al Ejecutivo francés 'reciprocidad' en el trato a las empresas españolas, al igual que en España se respeta 'de forma escrupulosa' las inversiones que están realizando las empresas del país vecino, informaron a Europa Press en fuentes de Moncloa.
El Ejecutivo español ha decidido llevar a cabo esta iniciativa ante el contencioso que mantienen Sacyr Vallehermoso y Eiffage, que sigue enquistado a la espera de la decisión de los tribunales franceses.
David Taguas ha telefoneado a su homólogo en el Elíseo, François Perrault, para expresarle la inquietud del Gobierno español ante esta situación, y le ha recordado los recientes movimientos de empresas francesas en el mercado español, caso de Suez en Aguas de Barcelona (Agbar) o de Crédit Agricole en Bankinter, que no se han topado con ninguna oposición por parte de los reguladores españoles ni con barreras proteccionistas.
El Ejecutivo español no esconde su preocupación por la presencia en Agbar de Suez, dado que el gigante francés también tiene una participación de control en Aguas de Valencia, ni tampoco su malestar por la poca antelación con la que Crédit Agricole le puso al corriente de su ofensiva en Bankinter (el día anterior a realizar la operación).
Sacyr y Eiffage esperan a los tribunales
Sacyr y Eiffage están a la espera de que los tribunales franceses se pronuncien sobre el contencioso que mantienen desde que el grupo español se hizo con un 33,3% del capital de la gala. El Tribunal de Comercio de Nanterre debe pronunciarse sobre la validez de la junta de Eiffage que acusó a Sacyr de concertación y anuló sus derechos de voto, mientras que la Corte de Apelación debe dirimir sobre la acusación de concertación en el capital de la empresa gala.