El glamour en banca se llama Bankinter
Los movimientos corporativos en banca son imparables. Y es que ya no hay presa demasiado grande. Hace un mes el primer grupo financiero español, Santander, se hacía con una parte del grupo más importante de Holanda, ABN Amro, en una operación que ha marcado historia. Se quedaba con su filial en Brasil, Banco Real, y con el italiano Antonveneta, que vendió a las tres semanas de su compra.
Ayer fue a la inversa. El quinto banco español, Bankinter, fundado hace 42 años por la familia Botín y Bank of America, dejaba paso en su accionariado al francés Crédit Agricole. Este grupo galo, el principal banco de Francia por ingresos y el segundo por activos, adquiría el 19,53% -un 4,54% en el mercado, y el 14,99% al inversor Ram Bhavnani-.
Bankinter ha sido durante años el claro objeto de deseo de bancos españoles y extranjeros. Incluso de las cajas de ahorros como La Caixa o Caja Madrid. No ha habido exposición de modelos de banca española en la que no se incluyera a Bankinter como ejemplo, y no era precisamente por su tamaño. Su capitalización no llegaba ayer a los 4.700 millones de euros.
Su modelo, centrado en banca de particulares con un cuidado y alto perfil, y de pymes y empresas, ha encandilado siempre a sus rivales. Sus propuestas innovadoras, su baja morosidad y alta tasa de cobertura, unido a su apuesta tecnológica, forman parte de su peculiar idiosincracia. Fue el primer banco español, y uno de los primeros del mundo que apostar por internet. Tanto fue así que hace 10 años pidió una nueva licencia bancaria para crear un banco online, proyecto que poco más tarde descartó, al optar por transformarse él mismo en banco tecnológico.
Su anterior presidente, Juan Arena definía a Bankinter como 'el gran Circo del Sol', porque circos hay muchos, pero 'éste es único, como Bankinter'.
Su actual presidente, Pedro Guerrero, también cree, o por lo menos así lo ha transmitido al mercado, en las peculiaridades de Bankinter. Y Crédit Agricole, ya que ha afirmado que es el banco que encaja en su estrategia, que lleva años intentando coquetear con él, y cuyo modelo no quiere alterar pese a convertirse en su primer accionista.
Jaime Botín, fundador del banco junto al resto de su familia, está condenado ahora a entenderse con el grupo francés.
Botín, que también ha sido presidente de Bankinter y el primer accionista hasta ayer con el 16,3%, no ha querido nunca desprenderse de sus acciones. Y oportunidades ha tenido. Pero habrá que ver ahora si se vuelve a repetir la lucha de poder en el banco. La pregunta es ¿si Botín se acostumbrará a ser el segundo inversor?. Con Bhavnani no. De ahí la guerra que mantuvieron ambos, y que en varias ocasiones llegó a disparar la cotización de Bankinter. Que Bhavnani controlase casi el mismo capital que Botín animaban las especulaciones de venta. Y el mercado no estaba descaminado. 'Todo tiene su precio', como aseguró ya el jueves el empresario indio afincado en Tenerife antes de conocerse esta operación.
Ram Bhavnani, de hecho, ya había sido tanteado y había tanteado a varias entidades. Y el mercado contaba con ello. Creía que Bankinter iba a ser el primero de los medianos en protagonizar una operación corporativa tras la compra del Urquijo. La composición de su accionariado y las características del grupo parece que así lo reclamaban.
Uno de los grupos que más ha coqueteado en los últimos meses con Bankinter, y más concretamente con Bhavnani, ha sido Sabadell. Uno de los grandes depredadores de la banca mediana española, que no oculta sus ansias de crecer con compras.
Hace justo un año Bhavnani comentó que uno de los bancos españoles que más le gustaba era Sabadell, y el que más podía complementarse con Bankinter. Durante la primavera y el verano pasado este inversor puso precio a su 14,9%, según explican varias fuentes. Pero lo elevado de la inversión, y el hecho de que el resto de los accionistas de Bankinter no quisieran vender fue descartando posibles compradores, entre ellos Sabadell. 'Que puede hacer el banco catalán con un 15% de Bankinter', señalan las mismas fuentes.
La pregunta ahora es donde colocará Bhavnani las plusvalías. ¿Ha pactado con Sabadell su entrada en el banco?. Ya es cliente desde no hace mucho tiempo, y el sector financiero le gusta. Mientras, Crédit Agricole iniciará negocios con Bankinter, como ha hecho con los bancos en los ya participa.