Terras Gauda planea comprar en Rioja
La bodega gallega planea comprar una competidora de Rioja
Tres tipos de uva dan al vino de Terras Gauda su especialísimo sabor. El 75% es uva de albariño, un 20% es de la variedad de loureiro, que significa laurel, y una pequeña parte es del tipo caiño blanco, una especie que estaba cayendo en desuso entre los viticultores por su compleja producción. A lo largo de 160 hectáreas de terreno, las bodegas Terras Gauda reparte sus cultivos y sus secretos. La empresa produce cerca de 1,5 millones de botellas al año de sus tres variedades de vino blanco en España y en 30 mercados internacionales. Cerrará las cuentas de 2007 con unos ingresos aproximados de ocho millones de euros.
'El crecimiento medio de la empresa se sitúa entre un 8% y un 10%', afirma Santiago Delgado, director financiero de las bodegas. Aunque esa sea la media, el 2006 fue un año excepcional en el que empezaron a vender en nueve países más y crecieron un 18% en ventas. 'Nuestro principal mercado fuera de España es la Unión Europea, con especial peso de Alemania y Reino Unido. Hemos tenido últimamente muchos pedidos de Noruega y empezamos a posicionarnos en China y en Japón', afirma Delgado.
El directivo detalla que la meta es que los mercados internacionales aporten un tercio de la facturación, Galicia, otro tercio y el resto de Comunidades Autónomas españolas, el tercio restante. 'Ahora mismo, Galicia y el resto de España suponen un 40% de los ingresos y el mercado internacional, un 20%', asume el director financiero.
Junto a esta expansión internacional, las bodegas tienen el objetivo de diversificar su cartera de producto mucho más en el futuro. 'Queremos ampliar nuestro catálogo con otras denominaciones de origen y otros productos alimenticios', explica Delgado. Hace cinco años, Terras Gauda compró una bodega en Arganza, localidad de El Bierzo (León) en la que fabrica su único vino tinto, Pittacum, con cepas de entre 50 y 80 años de antigüedad. Las ventas de este producto se incrementaron el año pasado un 175% y entró en veinte países.
En esta línea, Terras Gauda quiere comprar una bodega que le aporte nuevos vinos. 'Nuestra mente está en Rioja, sería el sitio perfecto para comprar una bodega pero ahora no hay ninguna a la venta', valora Delgado. Terras Gauda tiene claro que, a la hora de una adquisición, tendrán que hacerse con una bodega con un tamaña superior al suyo. 'En Galicia, somos la segunda bodega con mayor tamaño. Sin embargo, comparados con los Rioja, somos minúsculos. Aún así, tenemos una rentabilidad del 10%', detalla el directivo. La compra ya está apalabrada con Caixa Galicia, que posee el 5% de un capital repartido entre cerca de 82 socios.
Otra de las preocupaciones de Terras Gauda es la innovación. Actualmente, están comenzando el tercer proyecto de I+D que llevan a cabo en las bodegas en colaboración con la Universidad de Santiago, que se dedica a estudiar cuáles son los mejores tiempos y temperaturas de maceración de los vinos. 'Siempre hemos utilizado los mismos parámetros. Ahora, queremos comprobar si lo hacemos correctamente o podemos mejorar', explica una de las enólogas de la bodega. La empresa dedica unos 80.000 euros anuales a sus proyectos de I+D, a los que se suma la aportación de las subvenciones públicas. Ya han desarrollado uno sobre los tipos de uva que eran mejores para usar y sobre la fermentación de las levaduras.
Galicia, cartelismo y música de jazz
El presidente de Terras Gauda, José María Fonseca, es un gran defensor de la normalización del uso del gallego. Ex presidente de la Fundación Galicia Empresa, las etiquetas de sus vinos se imprimen en gallego.Comprometida con la cultura, la bodega organiza además un concurso de cartelismo anual en honor a uno de sus socios fallecidos, el cartelista Paco Mantecón. En 2007, concursaron 1.500 obras de 66 países.Además, Fonseca es saxofonista en el grupo de jazz Con la Venia, en el que toca una vez a la semana desde hace 30 años.