Caldera atribuye al diálogo social el 'éxito' en inmigración
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, afirmó ayer que el diálogo con empresarios y sindicatos llevado a cabo por el Gobierno socialista permitió el 'éxito' de las políticas españolas de contratación de inmigrantes. Caldera participó en la segunda jornada del Fórum sobre Trabajo Digno para una Globalización Justa de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en Lisboa. Allí destacó que el proceso de regularización que se llevó a cabo en 2005 permitió la legalización de cerca de 700.000 inmigrantes, gracias a la 'mesa de diálogo social entre Gobierno, sindicatos y empresarios'.
El ministro subrayó que la gran mayoría de la inmigración que llega hoy a España está motivada por razones económicas, un fenómeno que afrontó el Ejecutivo socialista a partir de la regulación de los flujos, la integración social de los recién llegados y la cooperación con sus países de origen. 'España defiende un modelo de coordinación de políticas con los países de donde procede la inmigración para encauzar ese fenómeno y si ese flujo está amparado por la ley es bueno para los dos países', apuntó el ministro español.
Caldera se refirió al 'catálogo de ocupaciones de difícil cobertura', que sirve de base para encauzar la llegada de trabajadores extranjeros. Además, resaltó que España favorece la formación profesional en origen, promovida por las quince escuelas-taller que financia Madrid en Mali, Mauritania o Senegal, entre otros países. El ministro español recordó que en 2006 entraron en España de manera legal 200.000 trabajadores, cifra que por primera vez superó a los que lo hicieron de manera fraudulenta.
Sócrates y la dignidad
El primer ministro de Portugal, José Sócrates, pronunció el discurso de apertura en el que abogó en el mismo foro por que se adopten mecanismos de regulación laboral ante la globalización y se defienda la 'dignidad' de los trabajadores.