Un millón de usuarios pide ayuda a Industria por la desaparición de la tarifa nocturna
Los usuarios que utilizan la tarifa eléctrica nocturna han denunciado en varias ocasiones ante Industria el fuerte impacto económico que las medidas introducidas por este departamento en el real decreto de tarifas de enero de 2007 (y las órdenes ministeriales posteriores para las revisiones trimestrales) suponen para el millón de hogares que utiliza la tarifa nocturna.
Estas medidas son fruto de la desaparición del sistema de tarifas, en el que sólo subsistirá la doméstica de último recurso y podría incrementar en un 50% el coste del recibo de la luz a los que ahora tienen la nocturna
De forma conjunta, las asociaciones Ficae (Fabricadores e Importadores de Acumuladores de Calor) y Anefic (Asociación Nacional de Empresas de Climatización y Confort) han pedido en varias reuniones con altos cargos del ministerio que dirige Joan Clos que se tomen medidas 'para paliar el durísimo impacto económico que sufrirán ante su obligatorio paso a la Tarifa de Discriminación Horaria (TDH)', señalan.
El descuento por el consumo de energía en las horas nocturnas se introdujo en España en 1983. Dicho descuento fue inicialmente del 35% y se mejoró hasta alcanzar el 55%, con un pequeño recargo del 3% para el consumo de día. La potencia contratada era la correspondiente a las horas diurnas y en las horas nocturnas, cuando funcionan los sistemas de acumulación, los usuarios podían disponer de la máxima potencia sin sobrecoste.
En enero de 2007, el citado real decreto, se introdujeron 'desastrosas novedades para el colectivo que usa la tarifa nocturna', según Ficae y Anefic. La 'más costosa', la desaparición de dicha tarifa el 1 de julio de 2008. Además, se obliga a los usuarios a pasar a la nueva TDH antes de esa fecha en condiciones que consideran 'muy desfavorables' y a contratar la máxima potencia demanda (en valle o en punta) desde el 1 de enero pasado. Por último, el recargo del 3% pasa al 35%.
Ante 'el desproporcionado impacto económico que podría suponerles el primer año un incremento del 50%' en su recibo de la luz y 'poner en peligro las inversiones en el sector', estas asociaciones han pedido al ministerio, sin frutos por el momento, que elimine la obligación de contratar la máxima potencia desde el 1 de enero de 2007; que se reduzca el diferencial del precio del kWh en punta de la nueva TDH, respecto a la doméstica, del 35% al 10% y se eliminen los costes adicionales para posibles ampliaciones de potencia de un colectivo.