Nokia pulveriza a Motorola y dispara un 85% sus beneficios
Ericsson fue la cruz de la temporada de presentación de resultados del sector de fabricantes de telecomunicaciones y Nokia fue ayer la cara. Todos los miedos que asaltaron al mercado tras el parón sufrido por el fabricante sueco líder en redes celulares, se calmaron al conocer las cuentas del primer fabricante mundial de teléfonos móviles.
Nokia ha ganado un 84,6% más en el tercer trimestre, ha pulverizado las previsiones más optimistas y lo ha hecho, en gran parte, comiendo terreno a su más directo competidor, Motorola. Las acciones reaccionaron en consonancia, pero mucho menos impresionadas que con la caída del 36% en los beneficios de Ericsson. La cotización subió un 2,54%, aunque por momentos la revalorización llegó al 7,5%. Con este impulso, Nokia acumula unas ganancias del 69,57% en lo que va de año, lo que convierte a 2007 en su mejor ejercicio desde 1999, en plena burbuja tecnológica.
Los cimientos que han construido esta subida son el crecimiento, los beneficios, la rentabilidad y la cuota de mercado. Nokia los ha lucido durante la primera mitad del año y los ha refrendado en el tercer trimestre. Las ventas crecieron un 28%, hasta 12.900 millones de euros, mientras que los beneficios se situaron en 1.560 millones. La ratio de beneficios operativos sobre ventas subió hasta el 14,4%, frente al 10,9% de un año antes, mientras que la cuota de mercado aumentó hasta el 39%. Nokia está a un paso de firmar cuatro de cada diez teléfonos que se venden en el mundo.
En estos momentos, la cuota de la compañía finlandesa es superior a la suma de las de Motorola, Samsung y Sony Ericsson. Y lo ha conseguido tanto por las fuertes ventas de su modelo estrella -el N95 de 550 euros- como con terminales baratos en mercados emergentes.