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Pensiones

El PSOE sugiere mejorar las jubilaciones anticipadas

El Pacto de Toledo de las pensiones, en el que están todos los grupos parlamentarios, se reunirá en 2008 y la portavoz socialista en este grupo, Isabel López i Chamosa, ya está elaborando propuestas para dicho foro. Entre sus sugerencias está la de suavizar los coeficientes penalizadores de los trabajadores que se ven obligados a jubilarse anticipadamente, al tiempo que se incrementen los incentivos para permanecer trabajando más allá de los 65 años.

La última reforma de las pensiones pactada por el Gobierno, la patronal y los empresarios está ahora en el Senado a punto de terminar su trámite parlamentario, para entrar en vigor inmediatamente después.

Sin embargo, el sistema de pensiones no se dará un respiro ya que el Pacto de Toledo -en el que todos los grupos parlamentarios evalúan el sistema cada cinco años-, tiene mandato de reunirse nuevamente en 2008 para proponer nuevas reformas.

La representante del Partido Socialista en el Pacto de Toledo, Isabel López i Chamosa, adelantó ayer, durante la celebración del 30 aniversario del Centro de Estudios Financieros (CEF) algunas de las ideas que su grupo baraja proponer para futuros cambios del sistema.

En su opinión, el hecho de que la ley actual penalice a los que se ven obligados a jubilarse entre los 60 y 64 años con un recorte de su pensión de entre un 6% y un 8% por cada año que se jubilen antes de los 65 años y, al mismo tiempo, la nueva ley vaya a incentivar con un aumento de la pensión de entre un 2% y un 3% por cada año que un trabajador se quede trabajando más allá de los 65 años es una situación 'injusta'.

Por ello, López i Chamosa consideró que debería buscarse un 'coeficiente neutro' que no castigara tanto a los que se ven obligados a dejar el mercado laboral y, además, supusiera un mayor incentivo para los que quieran permanecer en él tras la edad de jubilación.

La diputada socialista lanzó otras ideas que planteará en el Pacto de Toledo como la de buscar fórmulas para reconocer una pensión a muchas mujeres que, según explicó, han cotizado varios años a la Seguridad Social pero no llegaron a los 15 años que exige la ley recibir una pensión contributiva, porque dejaron de trabajar para cuidar a sus hijos.

Así, se refirió al ejemplo alemán donde existe una fórmula para contabilizar como cotizados los años que una mujer deja de trabajar para cuidar de su familia. Si bien, estas pensiones no serían contributivas en ningún caso, precisó. æpermil;stas no fueron las únicas ideas que se escucharon ayer para garantizar el futuro del sistema de pensiones.

El 'factor demográfico'

El director general del Instituto Nacional de la Seguridad Social, Fidel Ferreras y el director general de Ordenación de este mismo organismo, Miguel Ángel Díaz Peña, admitieron que 'verían razonable' que los responsables de futuras reformas se plantearan retrasar la edad de jubilación tanto como aumente la esperanza de vida.

Esto, que se denomina 'factor demográfico', consiste en que a partir de un determinado corte de edad, todos los trabajadores sabrían que si la esperanza de vida del país aumenta un mes, el momento de su jubilación deberá también retrasarse un mes. Esta fórmula se aplica ya en Suecia, Italia, Brasil y próximamente se hará en Portugal.

Dicho esto, ambos responsables de la Seguridad Social rechazaron firmemente 'la gran temeridad de hacer anuncios catastróficos con las pensiones para 2050', dijo Díaz Peña, quien añadió que 'estos agoreros lo que quieren es un mayor trozo de gestión de este pastel'.

Poner freno a la modalidad del retiro parcial

'La Seguridad Social nunca fue diseñada para que la gente dejase de trabajar', aseguró ayer el director general del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), Fidel Ferreras, quien ha alertado en varias ocasiones sobre la sangría y 'distorsión' que suponen al sistema las jubilaciones parciales. Esta modalidad, supone que, en la práctica, el trabajador se jubila a partir de los 61 años pero no ve recortada su pensión, como en el caso de la jubilación anticipada.La reforma de la Seguridad Social que está a punto de entrar en vigor endurece los requisitos de estas jubilaciones parciales, que ya suponen el 13% del total. Aunque, Ferreras consideró que la reforma 'debería haber ido más lejos' endureciendo aún más este tipo de retiro. Dicho esto, añadió que entre enero y agosto se habían registrado 19.360 altas de jubilación parcial, lo que supone que ya se está frenando el uso de esta fórmula.

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