_
_
_
_
Inversión

Persiste el recelo a las inmobiliarias

Las fuertes caídas en Bolsa las hacen más atractivas, pero los expertos no descartan nuevas correcciones

Primero fue la crisis de Astroc, que arrastró en Bolsa a casi todas las inmobiliarias españolas en las jornadas posteriores al 20 de abril de este año, después llegó la caída de la demanda de viviendas en Estados Unidos y los problemas financieros surgidos por las hipotecas de alto riesgo (subprime) de ese país. A estos factores se han unido el posible pinchazo de la burbuja inmobiliaria en España y los descensos generalizados de los mercados bursátiles. Como consecuencia, los valores del sector se encuentran entre los más castigados del Ibex y del mercado continuo en 2007, después de varios años de brillantes revalorizaciones.

Los datos están ahí. Desde el pasado 1 de enero, Astroc cae un 72,44%; Metrovacesa, un 35,69% y Sacyr, que cuenta también con un fuerte componente constructor, se deprecia un 42,2%. Hay más referencias: Fadesa baja un 20,91% y Colonial, un 21,04%. Esta crisis ha sido, asimismo, un factor decisivo en el pobre comportamiento de la salida de Realia a Bolsa.

Quedan incertidumbres

Pese a estas correcciones los expertos todavía se muestran muy cautos y no recomiendan entrar. Consideran que el castigo de los inversores en los mercados puede continuar en los próximos meses en un ambiente marcado por la susceptibilidad ante los problemas financieros e inmobiliarios.

Para Luis Regalado, director de banca privada de Banco Madrid, la compra de acciones de esas empresas no es aconsejable para personas con aversión al riesgo, porque es muy previsible que la volatilidad (movimientos bruscos de las cotizaciones) prosiga al menos en los dos próximos meses.

También Luis Sánchez de Lamadrid, consejero delegado de Banca del Gottardo, afirma que su entidad no recomienda ahora invertir en inmobiliarias españolas. Y justifica esta posición por varios aspectos. Destaca, por ejemplo, que la menor actividad no ha impactado todavía en los resultados de las compañías, lo que previsiblemente ocurrirá en el primer trimestre de 2008.

Y ese será un hecho que, en su opinión, puede volver a castigar los valores en Bolsa. Además, Sánchez de Lamadrid cita otras incertidumbres que seguirán pesando, como la reducción de las operaciones corporativas por los mayores problemas en la financiación, el alto grado de endeudamiento de algunas inmobiliarias y el aumento de stocks, especialmente de viviendas.

Jaume Filella, de Serbroker, destaca que las dudas continúan y que es más recomendable apostar por otros sectores si se quiere invertir en Bolsa. 'El efecto por la crisis de las hipotecas de alto riesgo es posible que no haya concluido y cualquier noticia negativa que surja, especialmente en EE UU, puede provocar que las cotizaciones de las inmobiliarias caigan de nuevo', manifiesta.

En este contexto, el analista de Serbroker añade que las precauciones son muy necesarias porque las Bolsas no están discriminando. Están, en líneas generales, sancionando también a las saneadas, aunque haya grandes diferencias dentro del sector. 'Cuando el pánico predomina en el mercado se opta por vender todo', concluye.

Pero tampoco es cuestión de que los inversores interesados por este sector pierdan el tiempo por las actuales turbulencias. Luis Regalado aconseja que se analice empresa por empresa, ya que pese a desplomes e incertidumbres, algunas han hecho los deberes en previsión del cambio del ciclo. Y ese conocimiento puede servir para invertir en el futuro.

Entre los factores a tener en cuenta Regalado destaca, en primer lugar, el origen de los ingresos. Son más atractivas las empresas que cuentan con buen mix de promoción (suelo, desarrollo de productos y venta) y renta (alquileres). Señala que las que han optado más por esta última actividad están en mejor situación porque dependen menos del ciclo inmobiliario, que puede tardar años en cambiar a positivo, y más del económico. Añade que otro tema clave es la diversificación geográfica. Los grupos que han invertido en Europa del Este, Alemania, Brasil o el Norte de África, cuentan en su haber con un reparto del riesgo más sensato.

Asimismo, Sánchez de Lamadrid indica que, aunque su entidad esté negativa en el sector, es necesario ser respetuosos con las que lo han hecho mejor. A su juicio, las más grandes están dentro de ese colectivo.

Las Bolsas penalizan el sector en Europa

Aunque las inmobiliarias españolas se encuentran entre las compañías europeas del sector que peor comportamiento han tenido en Bolsa este año, no han sido las únicas en caer en picado. El índice Bloomberg 500 pone de manifiesto que es el colectivo más castigado en 2007; la crisis ha impactado en empresas como Gecina, Rodamco y Klepierre. Fuera del área euro, Bristish Land y Land Securities, gigantes del sector, también se han desvalorizado con fuerza.Sin embargo, esta evolución está sirviendo para que la capitalización bursátil se ajuste al NAV (valor neto de los activos) y el descuento al que cotizan sea más elevado. En España, en donde esa relación es menos ortodoxa, el descuento medio ha bajado varios puntos desde el inicio de la crisis, aunque algunas empresas siguen cotizando con prima respecto al valor de sus activos. Precisamente Realia, una de las que su cotización está más por debajo de su NAV, es de las favoritas de los expertos, pese a que estén en general negativos. Citigroup inició en agosto la cobertura de la empresa participada por Caja Madrid y FCC con la recomendación de mantener. Señala que su modelo de negocio basado en el alquiler cuenta con potencial de crecimiento. Y Fortis indica que tiene un mix de actividades equilibrado.Pero, casos aparte de las compañías menos relacionadas con la promoción, al sector en Europa le puede afectar negativamente el final la etapa del dinero fácil que ya se ha iniciado. Y también que las ventas masivas de acciones de fondos, especialmente de hedge funds, continúe hasta fin de año. Algunos expertos consideran que tendrán que desprenderse de activos por 43.000 millones de dólares.

Archivado En

_
_