Strauss-Khan, favorito para suceder a Rato en la dirección del FMI
El ex ministro de Economía de Francia, Dominique Strauss-Khan, es el favorito para suceder al español Rodrigo Rato como director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI). Su único rival es el ex primer ministro checo, Josef Tosovsky, según ha anunciado el organismo financiero multilateral, al cerrarse el plazo para la recepción de postulaciones al cargo.
Durante el mes próximo, los miembros del Consejo Ejecutivo del Fondo entrevistarán a los candidatos en Washington y después se reunirán para analizar sus méritos y llevar a cabo la selección. Strauss-Kahn, de 58 años, fue designado candidato al cargo por la Unión Europea, en tanto que Tosovsky, quien también fue presidente del Banco Central de la República Checa, fue nombrado por Rusia.
Bajo presiones de algunos de los 185 miembros de la institución, el FMI señaló en junio que designaría a "cualquier candidato" sobre la base de sus méritos, sin importar su nacionalidad. Sin embargo, los expertos creen que en esta ocasión se mantendrá la tradición que da la gerencia del Banco Mundial (BM) a un estadounidense y la del FMI a un europeo.
Apoyo de EE UU
Estados Uniditos apoyará a Strauss-Kahn en una medida recíproca después de que este año el bloque europeo respaldó al estadounidense Robert Zoellick, quien sustituyó al también estadounidense Paul Wolfowitz como director gerente del Banco Mundial.
En lo que fue considerado como un espaldarazo para el ex ministro galo, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, manifestó el mes pasado que consideraba a Strauss-Kahn un "fuerte" candidato para asumir la dirección del FMI. "Dominique Strauss-Kahn es un fuerte candidato y espero continuar el diálogo con mis colegas en el Fondo en la conclusión del proceso de selección", dijo Paulson.
Por su parte, el primer ministro de Luxemburgo, Jean-Claude Juncker, aseguró que "entre los ministros europeos de finanzas, todos están de acuerdos en que Strauss-Kahn probablemente sea quien dirija al FMI en el futuro cercano".
Un candidato sin opciones
Ex aspirante socialista a la presidencia de Francia y ex ministro de Finanzas entre 1997 y 1999, Strauss-Khan dijo que su designación es "un primer paso" en el objetivo de redefinir la misión del FMI para dar mayor voz a los países de economías emergentes.
Considerado un socialista que no rehúye las bondades de la economía de mercado, a Strauss-Kahn se le atribuye haber preparado a su país para la adopción del euro a través de un control del déficit fiscal y de la aplicación de medidas de austeridad.
En contraste con la agitada actividad política del ex ministro francés, Tosovsky es un profesional de gran experiencia en el ámbito económico y financiero, pero de escasa prominencia internacional.
Según uno de los expertos, que pidió que no se le identificara, Rusia designó a Tosovsky sin mayores esperanzas de que sustituya a Rato, pero sí con la intención de establecer su opinión independiente sobre el problema. Más aún, el propio gobierno checo ha anunciado que mantendrá su apoyo al candidato de la UE, el francés Strauss-Kahn.
Una renuncia inesperada
Dos años antes de concluir su mandato, Rato anunció en junio pasado que abandonaría el cargo en octubre, tras la asamblea anual del organismo y el Banco Mundial (BM), por "razones personales".
En una declaración dirigida al Consejo Ejecutivo del Fondo, Rato citó entre esas razones personales, sus "circunstancias y responsabilidades familiares, en particular la educación de mis hijos". También explicó que anunciaba su marcha del organismo con anticipación para dar el tiempo suficiente al Consejo Ejecutivo para designar un sucesor.
La designación del sucesor de Rato ocurre en un momento de profundos cambios en la institución financiera multilateral, que ve cómo queda de lado su papel tradicional de prestamista a países con problemas de liquidez para perfilarse más como un guardián de la marcha de la economía global.
El Fondo se encuentra también inmerso en un proceso de reforma interna para reajustar, entre otras cosas, las cuotas de voto que adjudica a los diferentes países y que hasta ahora conceden un poder desproporcionado a las economías más desarrolladas.
Durante la Asamblea anual de 2005, Rato anunció la apertura de ese proceso presionado por los países de economías emergentes, que quieren una mayor voz en la gestión de la institución.
El FMI es la institución internacional encargada de supervisar la salud de la economía mundial y de prestar ayuda a los países con desequilibrios en su balanza de pagos.