Cajamar aprueba la fusión con Caja Rural del Duero
La Asamblea General Extraordinaria de Cajamar ha aprobado, con 3.826 votos a favor y 35 abstenciones, la fusión por absorción de la Caja Rural del Duero, que en otra asamblea extraordinaria paralela dio luz verde al proceso con un 93,08% de votos a favor.
La Asamblea General Extraordinaria de Caja Rural del Duero ha aprobado, hoy con el 93,01 por ciento de los votos, la absorción por la andaluza Cajamar, aunque los opositores a esta operación han anunciado que recurrirán a los tribunales. La integración de Caja Rural del Duero en Cajamar se espera que sea efectiva a 1 de enero de 2008, si no prosperan los recursos anunciados por sus detractores, y convertirá a Valladolid en sede de la entidad para todo el noroeste de España.
El acuerdo "no es un funeral" para Caja Rural del Duero, según declaró su presidente, José Millaruelo, durante la asamblea celebrada en la sede central de esta entidad en Valladolid, a la que asistieron alrededor de noventa delegados en representación de sus cerca de 25.000 socios.
Falta el visto bueno de las Administraciones
"Es un momento ilusionante de futuro", defendió el presidente, quien consideró que "la fusión no es un fin en sí misma, sino el inicio de un proyecto", que a partir de ahora debe contar con el visto bueno de los gobiernos central, de Castilla y León y de Andalucía. José Millaruelo lamentó los ataques "personales" por parte de los contrarios al proceso, encabezados por la Unión Regional de Cajas Rurales de Castilla y León.
El presidente hizo estas declaraciones antes de que se procediera a la votación por parte del Consejo Rector de Caja Rural del Duero, ya que los socios ya se habían pronunciado en once juntas preparatorias celebradas en las provincias donde opera esta entidad, es decir, en Ávila, Palencia, León y Valladolid.
De los 39.864 votos emitidos, ya que a algunos socios les corresponde más de un voto, 37.076 fueron a favor, 2.003 negativos, 518 en blanco, 267 nulos y hubo 1.215 abstenciones. Tras conocer el resultado, Millaruelo dijo que "la puerta está abierta" para que el sector crítico se desvincule de la entidad y animó al resto de cajas rurales de Castilla y León, de ámbito provincial, a intentar la fusión que no fue posible con Caja Rural del Duero.
Algunos socios impugnarán el proceso
Al término de la Asamblea, algunos socios hicieron constar en acta que impugnarán el acuerdo, por considerar que hubo una serie de irregularidades en el proceso. Tras la Asamblea, el declaraciones a los periodistas, José Millaruelo destacó que la delegación de Cajamar con sede en Valladolid pretende alcanzar en 2009 un volumen de negocio de unos 4.000 millones de euros en Castilla y León, Asturias, Cantabria y Galicia, con cerca de 150 sucursales bancarias y 360 empleados.
La expansión de Cajamar por el resto de provincias de Castilla y León en las que no está presente Caja Rural del Duero no será "una agresión" para el resto de cajas rurales, según Millaruelo. El presidente aseguró que la Junta de Castilla y León "ni apoya ni no apoya" esta operación, sino que "ofrece su responsabilidad institucional" a Caja Rural del Duero después del fallido intento de unir a todas las cajas rurales de esta Comunidad Autónoma.