Aperitivos de alta costura italiana
En Milán y en Tokio se puede beber un café con estilo, cenar con glamour o tomar unas copas con los amigos rodeados de iconos de la moda. La exclusividad de los diseñadores de moda ha trascendido la frontera de la tela y los bordados y, entre toques de sal y pimienta, han emprendido la conquista del público con nuevas delicias gastronómicas.
El reconocido diseñador italiano Giorgio Armani ha dado el primer paso, y junto al internacional chef japonés Nobuyuki Matsuhisa, ha abierto las puertas del restaurante Armani/Nobu en Milán. 'Le sugerí a Nobu que abriéramos un restaurante porque lo considero un genio en el arte culinario japonés', explica el reconocido diseñador en la página web del restaurante.
El Armani/Nobu está ubicado en Armani/Via Manzini 31, en el pacífico y aristocrático vecindario de Via Pisoni, y consta de un bar en la planta baja y un restaurante y bar de sushi en el primer nivel. El interior del local, adecuado para 130 personas, está decorado con la elegancia sobria que surge de la combinación del estilo Armani junto con el diseño japonés tradicional.
Pero la exclusividad del servicio va más allá y ofrece a sus clientes más exigentes el Armani/Privé, un espacio reservado para reuniones, presentaciones o fiestas de cóctel.
El sueño de Armani ha sido compartido por la cadena de modas Gucci. Esta vez por partida doble. De la misma forma que dicta el eslogan familiar del imperio Gucci -'La calidad es recordada aún mucho tiempo después que el precio es olvidado'-, los Gucci Café, ubicados en Milán y en Tokio, han sobresalido, gracias al ambiente de exclusividad que rodea a sus comensales.
Tokio, más Gucci que Milán
En el distrito de Ginza (Tokio) el ambiente es incluso más Gucci que en Milán, ya que el café está ubicado en la cuarta planta de un edificio exclusivo de la firma, por lo que el comensal se siente rodeado de la cultura Gucci de pies a cabeza.
El interior del café está decorado con un magnífico mural realizado con una técnica japonesa de lacado de la artista Nancy Lorenz, que se compone de elementos dorados y plateados con detalles del bambú Gucci, haciendo así referencia a uno de los símbolos más famosos y apreciados del imperio de modas italiano.
Entre la elegancia de la moda y el relax acuático
De vuelta en Milán. Para aquellos que aún quieren tener una opción extra para tomarse un café con elegancia, hay más. Volviendo a Milán, Roberto Cavalli también se ha unido a la industria de la alimentación. En Via Spiga 42, donde Cavalli tiene su exclusiva tienda de modas, un peculiar elevador lleva a los clientes hasta un lugar donde tomarse un descanso, el Café Cavalli. Con una decoración única, al estilo Cavalli, una variedad de telas orientales exuberantes recubren los pisos y paredes. Además, pieles de antílope recubren las sillas, y como un toque diferente que ayuda a liberar tensiones, se han dispuesto en las mesas pequeñas peceras en donde se pueden apreciar peces dorados. Toda una experiencia.