La inversión estatal en las carreteras catalanas cae un 4,4% desde 2000
Los retrasos ocasionados el pasado sábado por el colapso de la autopista AP-7 en Tarragona han reabierto el debate sobre las inversiones en infraestructuras. Según los últimos datos disponibles, de 2005, el gasto efectuado por el Estado en carreteras catalanas pertenecientes a su red ha disminuido un 4,4% desde 2000.
Un año más, surge la polémica sobre qué comunidad autónoma recibe más o menos dinero para infraestructuras. Esta vez no es como consecuencia de la negociación entre partidos para recabar apoyos de cara a la aprobación de los presupuestos, sino en respuesta al colapso que se produjo en la autopista AP-7 a la altura de Tarragona.
Según las últimas cifras de la liquidación presupuestaria de 2005, a las que ha tenido acceso Cinco Días, la inversión realizada en Cataluña en carreteras dependientes del Estado ascendió ese año a 182,5 millones de euros frente a los 191 de 2000, un 4,4% menos. Junto a Cataluña, sólo Murcia (-44), Canarias (-21%), y Galicia (-0,9%) perdieron inversión. Por contra, el resto de las regiones vieron aumentado el dinero dedicado a carreteras por parte del Estado en esos cinco años, algunos con crecimientos del 459% (Extremadura), 139% (Cantabria), 91% (Asturias) o 85% (Baleares).
Una parte de este descenso es atribuible a la cesión de competencias del Estado de algunas vías, que a partir del acuerdo entre administraciones pasan a titularidad autonómica o municipal, explican desde la Asociación Española de la Carretera.
Sin embargo, las cifras de Fomento indican que, pese a esa disminución de la inversión del Estado, la red de carreteras de su propiedad ha aumentando en kilómetros en Cataluña desde 1.962 kilómetros en 2000 a 2.013 en 2005. La explicación a esta aparente contradicción entre ese aumento de kilómetros y la disminución en el gasto se debe al hecho de que cada vez cobran mayor protagonismo las inversiones que aportan las sociedades concesionarias de autopistas de peaje. Estas empresas asumen el coste de construcción, pero a cambio se hacen cargo de su explotación por periodos que pueden alcanzar los 75 años, aunque la infraestructura sigue siendo pública. Los datos que maneja Fomento sostienen que las concesionarias han pasado de invertir en Cataluña 21,02 millones de euros en 2000 a 64,1, en 2005, el 204,9% más.
Así, la cesión de competencias y la apuesta por la iniciativa privada están modificando el peso de los agentes inversores en carreteras. En el conjunto de España, el Estado no llega al 38%, las regiones un 32,4%, las concesionarias un 18,9% y diputaciones y cabildos un 10,8%.
El coste de la apertura de la barrera
Un portavoz de Abertis señaló ayer que negociará con el Servicio Catalán de Tráfico y el departamento de Obras Públicas de la Generalitat de Cataluña un protocolo definitivo sobre las causas por las que se deben levantar las barreras de la autopista. Las mismas fuentes de la concesionaria presidida por Isidre Fainé y titular de Acesa, propietaria a su vez de la autopista AP-7 a su paso por Tarragona, recordaron que actualmente no existe ningún protocolo que obligue a abrir el paso gratuitamente en caso de colas, aunque sean de 75 kilómetros.En cualquier caso, el portavoz de Abertis se mostró abierto a negociar a medio plazo los costes de la apertura de barreras, que supusieron que alrededor de 15.000 vehículos no pagaron el sábado pasado. El consejero de Obras Públicas, Joaquim Nadal, explicó que la concesionaria debería correr con estos costes, porque el propio aumento del tráfico compensa la situación de excepcionalidad. Nadal insistió ayer en que la circulación en Tarragona mejorará con la eliminación de los peajes troncales y con la instalación de un tercer carril previsto, que la concesionaria licitó precisamente la semana pasada.Las fuentes de Abertis coincidieron, y recordaron, que la empresa presentó los planes de ampliación de la autopista en 2000, que no fueron aprobados hasta junio de 2006. Abertis invertirá un total de 500 millones en estas obras que se iniciarán en septiembre próximo.Obras Públicas de la Generalitat prevé invertir este año un total de 1.822,1 millones en desdoblamientos de ejes viarios, soterramientos y ampliaciones de carreteras. Sin embargo, es dinero no se podrá usar en desdoblar la N-340 a su paso por Tarragona, porque su titularidad corresponde al Ministerio de Fomento. La ampliación de la capacidad de esta carretera podría ayudar a evitar colapsos como los del sábado.
crecimiento de la red Fomento se centra en las autovías
Las cifras demuestran que en los últimos años se ha logrado atajar buena parte de la brecha que tradicionalmente existía entre la red de infraestructuras viarias de España y el centro de Europa.El incremento en la red de carreteras del Estado ha sido en el periodo 2000-2005 de 1.310 kilómetros. Todos ellos de vías de alta capacidad, ya que en el resto de la red estatal se ha registrado un retroceso de 500 kilómetros.Algunos estudios elaborados por asociaciones de profesionales de la carretera y otros organismos critican, en este sentido, que en ocasiones la falta de coordinación entre administraciones provoca que una infraestructura estatal resulte parcialmente inoperativa por no haberse previsto la construcción de algún enlace perteneciente a una comunidad autónoma o un ayuntamiento.Los datos agregados, no obstante, ponen de manifiesto que desde 2000 hasta finales de 2005 la inversión de las regiones en carreteras ha aumentado un 69%, la del Estado, un 33%, la de las concesionarias, casi un 500%.