El FMI revisa al alza el PIB de España, pero alerta del riesgo inflacionista
El Fondo Monetario Internacional (FMI) elevó ayer dos décimas sus previsiones de crecimiento de la economía española para este año, hasta el 3,8%. Si bien, al mismo tiempo, alertó sobre un posible 'sobrecalentamiento' de la actividad económica que tendría como consecuencia un repunte inflacionista.
'Con el tiempo, se puede encontrar en una situación en la que el crecimiento tiene que reducirse de forma bastante drástica y eso es lo que intentamos evitar', dijo ayer a Efe Charles Collyns, subdirector del departamento de análisis del FMI. Para ello, instó al Gobierno español a contener el gasto y a fomentar la competencia en los sectores menos liberalizados.
'Ciertamente, no esperamos una crisis en España -añadió Collyns- pero el déficit por cuenta corriente es muy amplio y es producto de la gran demanda interna. Por eso nos preocupa que haya un sobrecalentamiento de la economía'.
En cualquier caso, esta revisión al alza de la previsión de crecimiento se produjo dos días antes de que el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda Pedro Solbes, revise previsiblemente al azar el avance del PIB, estimado ahora en el 3,4%, lejos de las últimas tasas de crecimiento que se han situado en el entorno del 4%.
El FMI elevó también tres décimas su previsión de crecimiento de la economía mundial, hasta el 5,2%, pese a la desaceleración detectada en la economía estadounidense. De hecho, el Libro Beige sobre la situación económica en EE UU, que publicó ayer la Reserva Federal (Fed), indica que la economía estadounidense siguió creciendo en junio y julio de forma 'moderada', ya que la ralentización del mercado de la vivienda se vio contrarrestada con la mejora de la industria manufacturera.
Por su parte, el documento del Fondo destaca la expansión del resto de países como China, India y Rusia, que explican más de la mitad del crecimiento mundial previsto.
Alertas de la FED
Entre los riesgos de la economía de EE UU que indicó ayer la Fed destaca la presión inflacionista del precio del crudo, aunque admitió que los precios minoristas crecen de forma moderada. Y alertó sobre el aumento de los salarios de los más cualificados.