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CincoSentidos

Siete reglas para el hombre moderno

El culto al desarrollo personal y a la estética fija nuevas pautas para alcanzar el éxito profesional

Asesores personales, consultores de imagen, expertos en cuidados... todo un batallón de profesionales rodean al hombre de negocios con un objetivo común: que logre el éxito en su carrera profesional cuidando su mente y su cuerpo. De la mano de Philips, que acaba de lanzar su nueva afeitadora Arcitec, un grupo de expertos ha elaborado siete máximas indispensables para un hombre moderno. La clave que inspira estas nuevas reglas es sencilla: mejorar por dentro y que se note por fuera.

1 Vestido para el éxito. Lee Kynaston, editor de belleza de la revista Mens's Health, tiene muy claro cuál es su consejo estrella: 'no te vistas para el trabajo que ya tienes. Vístete para el trabajo que te gustaría tener'. Y es que el afán de superación, además de en la calidad del trabajo, también se deja ver en la imagen que se transmite. ¿Ambicioso? Eso es lo que se busca en las empresas porque la ambición lleva al progreso.

2 Aprende de tus errores. La superación de uno mismo, de los límites y las barreras -tantas veces autoimpuestas- suele ser uno de los retos a los que se enfrentan los ejecutivos que se ponen en manos de un entrenador personal. Pero en esta segunda regla, reside gran parte de la esencia de los siete mandamientos del hombre moderno. Al igual que los mejores atletas vas superando las derrotas y las oportunidades perdidas, el hombre de negocios no puede permitirse el regodearse en el fracaso.

3 Los modales aún importan. Más allá de saber ceder el paso o comportarse en la mesa, la buena educación se extiende a otros ámbitos como internet. Dylan Jones, autor del libro aún sin traducir al español Mr Jones' rules for the modern man (Las reglas de Mr Jones para el hombre moderno. Hodder & Stoughton, 2006) aconseja: 'nunca menciones en un mail a otra persona a menos que te asegures de que también está en copia'. Y es que mucha gente escribe cosas que jamás se atrevería a decir en persona. La buena educación en internet significa, por ejemplo, evitar el uso de esas mayúsculas sinónimo de gritos desagradables o evitar coquetear. Antes de enviar, siempre hay que releer el mensaje. En juego puede estar el puesto de trabajo.

4 Nunca dejes de aprender. Hay que evitar el estancamiento y para ello buscar siempre la formación continua. Pero también, como señala la asesora personal Fiona Harrold, autora de The seven rules of success (Las siete reglas del éxito. Paperback, 2006), 'a veces merece la pena tener una charla a fondo con tu jefe y decirle dónde te gustaría llegar y cómo puede ayudarte a conseguirlo'.

5 Los buenos cuidados dan resultados. 'La gente te juzga en base a la presentación que hagas de ti mismo y proyectarás la mejor imagen cuanto más cómodo te sientas contigo mismo. Ir correctamente vestido te dará seguridad', aconseja Sean Harrington, director ejecutivo de la firma británica Elemis, dedicada a los cuidados corporales.

6 Sé valiente y cree en ti mismo. Toda norma tienen una excepción y para eso está la sexta regla. 'Lo que importa es seguir adelante y hacer cosas. Si piensas demasiado, terminarás teniendo que consultarlo todo y no hay ninguna regla para saber como actuar'. Lo dice Simon Woodroffe, fundador de YO! Company.

7 La clave está en los detalles. Botones descosidos, puños gastados, arrugas... La consultora de imagen Jenny Cutler lo tiene claro: 'son cosas inadmisibles'. Es importante la ropa, pero también cómo se cuida. Detalles desatendidos dan al traste con una imagen que originalmente pudo ser impecable.

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