Segura advierte que reforzará el control sobre las inmobiliarias
El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Julio Segura, anunció el viernes que el regulador de los mercados españoles 'reforzará los controles en el futuro' sobre las empresas inmobiliarias cotizadas por tratarse de un sector 'de aparente riesgo contable'.
En su primera intervención pública como presidente de la CNMV, Segura aseguró que se está dedicando 'especial atención' a las valoraciones de los activos inmobiliarios, que 'han cambiado el signo de los resultados consolidados' de algunas compañías del sector cotizadas.
La mayoría de las inmobiliarias que salieron a Bolsa en España durante 2006 lo hizo con valoraciones de sus activos que incluían consideraciones subjetivas. 'La valoración de carteras inmobiliarias es esencialmente subjetiva, dadas las particularidades de cada uno de los elementos que las componen', admitía Parquesol en su folleto de OPV sobre la valoración de sus activos realizada por Aguirre Newman.
El objetivo, según Segura, es comprobar que estas valoraciones 'se generan con procedimientos, hipótesis y criterios reconocidos' e incluso pedir valoraciones o tasaciones complementarias de los activos 'a sociedades de reconocida solvencia sometidas a algún tipo de supervisión'. 'El método de valoración seguido por Knight & Frank difiere de los criterios de valoración empleados habitualmente por otras empresas del sector inmobiliario', reconocía Riofisa en su folleto de salida a Bolsa. La tasación que hizo CB Richard Ellis de los activos de Realia, que salió el pasado mes a Bolsa, 'se fundamenta en numerosas hipótesis sin confirmar', admitía la compañía controlada por FCC y Caja Madrid. Y Astroc explicaba en su folleto de salida a Bolsa que sobre el suelo protegido adquirido por la compañía en Baleares 'en el futuro podría plantearse la posibilidad de alcanzar un acuerdo con las administraciones locales tendente a su intercambio por suelo urbanizable en otra ubicación'.
El presidente de la CNMV señaló en su intervención que el modelo del valor razonable de los activos, que es el más utilizado por las grandes inmobiliarias europeas, 'puede introducir volatilidad en los resultados, sin generar flujo de caja real alguno, al ser un mero apunte contable'.
Cuentas semestrales
A juicio de Segura, 'el mejor valor razonable se obtiene de los precios actuales en un mercado activo para propiedades similares en una misma localidad y condiciones' y 'no debe reflejar ni expectativas futuras que podría generar la inversión inmobiliaria ni posibles sinergias futuras por aspectos fiscales, legales o de índole regulatoria, sino su situación y condiciones actuales'. En cuanto al consejo de administración de las compañías, cuyos miembros formulan en la actualidad sólo las cuentas anuales, ha señalado que 'en el futuro también firmarán los estados semestrales'.
En este sentido, el sexto presidente del supervisor bursátil desde su creación en 1988 destacó el papel que deben desempañar en el proceso de valoración de activos los tasadores y auditores, así como el de la CNMV, que 'presta especial atención' a las valoraciones de activos inmobiliarios que no procedan de criterios reconocidos.
Segura también destacó la necesidad de que las compañías transmitan a los inversores 'de una forma más clara y didáctica' los verdaderos riesgos a los que se enfrenta cada sociedad en función de sus características dentro de su sector, además de una valoración de su impacto económico.
Discrepancias de valoración en Ayco
La polémica en torno a las valoraciones realizadas sobre los activos de las inmobiliarias no sólo atañe a las grandes compañías cotizadas. El grupo Ayco, con una facturación anual cercana a los 20 millones de euros, informó a finales de junio la consideración adoptada por el consejo sobre la opa lanzada por el grupo Onofre Miguel. El consejo se negó a la oferta argumentando que CB Richard Ellis valoraba el precio de la acción en 22,56 euros mientras que la opa era a 15 euros.