El Gobierno duplica los fondos para dependencia
Los Presupuestos Generales del Estado de 2008 duplicarán los fondos para financiar la puesta en marcha de la Ley de Dependencia hasta los 900 millones de euros, frente a los 400 millones incluidos para este año.
La partida para gastos de dependencia del próximo año la hizo pública ayer el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, en la Comisión de Presupuestos del Congreso. Algunos grupos parlamentarios, como CiU habían solicitado en días previos que el Estado central desembolsara más dinero, unos 2.000 millones de euros, en diversos conceptos para acelerar la puesta en marcha de la Ley de Autonomía Personal y Dependencia, que tiene previsto su desarrollo gradual (y financiación correspondiente) hasta el año 2015. Sin embargo, Ocaña indicó ayer que con 900 millones 'estará cubierto' el despliegue de la ley' previsto para 2008, que cubrirá a los casos más graves de personas dependientes (no se pueden valer por sí mismas). La cobertura del resto de población se irá incorporando hasta 2015.
Las primeras estimaciones hechas hace un año por el Ministerio de Trabajo barajaban un coste de implantación de 1.357 millones de euros sólo para el año 2008, a financiar a partes iguales por el Estado central y las comunidades autónomas. Algunos grupos parlamentarios como el PNV se quejaron ayer amargamente ante Ocaña de que el techo de gasto del Estado fijado para 2008 (153.000 millones) y recientemente aprobado por las Cortes, limita el margen del Gobierno para sufragar todos los compromisos de gasto adquiridos, incluido el de la dependencia.
El secretario de Estado espera contar con el apoyo suficiente para sacar adelante los Presupuestos de 2008 (aún en fase previa), aunque reconoció que 'habrá que negociar duro'. El Gobierno necesita del apoyo de al menos CiU e IU, teniendo en cuenta que el PP los rechazará. El PP ya ha dicho que los considera expansivos, pese a que prevén un superávit del 1,15% del PIB para el conjunto de las administraciones públicas.
Excedente de 14.359 millones
Por otro lado, Ocaña aprovechó ayer para anunciar los últimos datos de la ejecución presupuestaria de este año que confirman el 'buen momento' que viven las finanzas públicas. El Estado central registró hasta mayo un superávit de 14.359 millones de euros en términos de contabilidad nacional (homologado por Bruselas), equivalente al 1,4% del PIB, lo que supone un 39% más que en los cinco primeros meses del año anterior.
El excedente fiscal acumulado se debe al fuerte crecimiento de los ingresos por impuestos, que aumentaron a un ritmo del 12% pese a las rebajas fiscales que han entrado en vigor en enero. En el caso del impuesto de sociedades, la recaudación aumentó hasta mayo un 22%, una vez contabilizado el primer pago a cuenta de las empresas, cuyos beneficios siguen al alza. No obstante, Ocaña no quiso lanzar las campanas al vuelo, indicando que los datos hasta mayo no son significativos de lo que puede ocurrir el resto del año (los mayores gastos se concentran en otoño). Con todo, reconoció que tales cifras permiten mantener la previsión de que el Estado 'volverá a registrar un excedente al menos como en 2006', a pesar de la desaceleración de algunos sectores como la construcción 'que puede costar alguna décima de crecimiento al PIB'.
El excedente del Estado se une al de la Seguridad Social que registró hasta mayo un superávit de 8.603 millones, gracias al alza del 7,8% de los ingresos por cotizaciones. Durante la comparecencia, la portavoz del PP Fátima Báñez criticó a Ocaña por la 'baja ejecución' de partidas como becas y vivienda. El secretario de Estado indicó que hay que esperar a que avance el año para sacar conclusiones, dada la estacionalidad de las mismas.
La inversión en Bolsa de las pensiones, a partir de 2008
La posibilidad de invertir en Bolsa parte del fondo de reserva de las pensiones públicas, incluida en el proyecto de ley de reforma de la Seguridad Social, en trámite parlamentario, fue otro de los asuntos discutidos ayer en la Comisión de Presupuestos. Carlos Ocaña defendió esta posibilidad siempre que se haga con un criterio de prudencia, 'como así se va hacer', y con el fin de mejorar la rentabilidad de una hucha que ya llega a 40.000 millones de euros. Aunque Ocaña animó al Partido Popular a unirse al proyecto, Fátima Báñez (PP) recalcó en la Comisión el rechazo de su partido a lo que consideró 'una temeridad'.En principio, tal y como indicó el vicepresidente Pedro Solbes, sólo está previsto que se dedique a Bolsa en torno a un 10% del fondo. Ocaña indicó ayer que, dado el retraso en la tramitación de la ley (se busca que el PP se sume al final) y la necesidad de un reglamento que la desarrolle, 'la inversión sólo será posible en la próxima legislatura', a partir de 2008.