Neumáticos para drenar carreteras

Las ruedas de los vehículos no pueden ir a parar a vertederos. Lo prohíbe un real decreto de 2005. Hay que reutilizarlos o reciclarlos. Pero ¿adónde pueden ir a parar las 236.000 toneladas de neumáticos usados que, según datos de Signus (Sistema de Gestión Integrado de Neumáticos Usados) se generan anualmente en España? Aunque parte pueden ser reutilizados para la venta de segunda mano o el recauchutado, hay un 85% de ruedas que necesitan un destino final para su existencia.

En este sentido se orienta una de las líneas de investigación de I+D+i de Acciona. La empresa ha decidido aprovechar este residuo complicado de gestionar y darle un nuevo valor en obra civil y construcción. 'La empresa se dio cuenta del problema medioambiental existente con los neumáticos fuera de uso y decidimos empezar a investigar qué posibles desarrollos o aplicaciones podrían tener', explica Faiver Botello, del departamento de I+D de Acciona.

Las primeras indagaciones les llevaron a fijarse en Estados Unidos. Allí ya se estaban llevando a cabo proyectos en los que las ruedas usadas podían tener una finalidad en las infraestructuras. A partir de ahí empezaron sus propios desarrollos y aplicaciones. Por ahora han encontrado el modo de utilizar las ruedas troceadas en el relleno de terraplenes, para el refuerzo de la parte trasera de los muros y para mejorar el drenaje de las carreteras. 'Aporta varias ventajas a la obra civil, como la permeabilidad, un peso reducido y menor densidad, así como alta resistencia. Pero lo más importante es que solucionamos un problema medio ambiental, reducimos el volumen de residuo y les damos nueva importancia', detalla Botello. Las ruedas eliminan peso de las estructuras porque sustituyen a la tierra y a los áridos.

Fabricación de hormigón

De momento ya hay un terraplén de acceso a un paso superior en la M-111, en la variante de Fuente el Saz (Madrid) que esconde en su interior este nuevo elemento de construcción. Alberga 1.200 toneladas de neumáticos, que son aproximadamente 275.000 ruedas de coches. 'Conseguimos el permiso del Ministerio de Medio Ambiente y realizamos el proyecto con la Universidad Autónoma de Barcelona', explica Botello. Es la primera que se ha llevado a cabo totalmente.

La siguiente aplicación que están estudiando es utilizar los neumáticos en la fabricación de hormigones, en sustitución de áridos. 'No sería aplicable para hormigones estructurales porque son materiales de baja resistencia y no aguantarían los pesos. Se dedicarían a otros usos como medianas de carreteras, que no soportan tanta presión', asegura el investigador de Acciona. Aún no han encontrado la forma de aplicar esta nueva técnica en la edificación.

Botello considera que la investigación sobre materiales reciclados 'tiene mucho margen de maniobra' y 'más si la empresa quiere continuar con su compromiso de ser sostenible'. 'El consumo desproporcionado de materiales es inviable actualmente así que estas investigaciones son clave para el respeto al medio ambiente', afirma.

Un edificio autosuficiente y sin emisiones

Acciona Solar acaba de presentar en sociedad una nueva sede, construida en la Ciudad de la Innovación de Navarra, un parque tecnológico próximo a Pamplona. Se trata del primer edificio en España destinado a oficinas y que no es sólo experimental, que ha sido concebido y certificado como cero emisiones. Para lograrlo, la sede de Acciona Solar cubre todas sus necesidades energéticas y, además, no emite gases de efecto invernadero. Consume un 52% menos de energía que un edificio convencional y el resto lo cubre con producción renovable. Incorpora sistemas solares térmicos y fotovoltaicos, geotérmicos y de biocombustibles junto a otros dispositivos de ahorro y eficiencia energética. Acciona ha invertido cuatro millones en la construcción de la que es su apuesta por la edificación sostenible.