El debutante más buscado
El joven Pablo Martín hace trío con Olazábal y Sergio García en la jornada de hoy.
Un campo inhóspito en las inmediaciones de Pittsburg (Pensilvania) es el escenario escogido para la celebración de la 107 edición del US Open, cuyo nacimiento tuvo lugar en Newport en 1895. Un total de 156 golfistas aspiran a suceder al australiano Geoff Ogilvy en el palmarés. Entre ellos tres españoles: José María Olazábal, Sergio García y Pablo Martín Benavides, quienes jugarán en el mismo grupo por primera vez en la historia de un grande.
El vasco abre el juego hoy a las 07.55 de la mañana (13.55 en nuestro país). La transmisión puede seguirse en directo a través del canal Golf+ (dial 53 de Digital+) y de Canal+, que cada noche ofrecerá un completo resumen. A la experiencia de Olazábal, que ha intervenido en 75 grandes para apuntarse la victoria en dos (Masters de 1994 y 1999), y de García, que cuenta con 35 participaciones, se une el debut del joven Pablo Martín Benavides, de 21 años. Hace dos semanas abandonó su estatus de golfista amateur para dar el salto al mundo profesional, donde ha firmado el primer contrato de su carrera con Nike. Un acuerdo como el que posee Tiger Woods, el número uno mundial y el deportista mejor pagado del mundo, aunque las cifras no son comparables.
Martín es el debutante más buscado de este US Open. Afincado en Oklahoma desde 2004, donde ha sido miembro del equipo de la Oklahoma State University, se convirtió en el primer aficionado que ganó un torneo del circuito profesional europeo. Fue el pasado mes de abril en el Abierto de Portugal, donde por su condición de amateur renunció a un premio de 208.330 euros.
'No quiero ni imaginar cómo será mi primer golpe', dice Pablo Martín
Un porvenir brillante
El avance en su carrera deportiva ha motivado que cuelgue sus estudios de Económicas, carrera de la que le queda un curso. Está claro que las cuentas le salen y que ante sí tiene un porvenir brillante. 'Al menos tengo que probarlo, no me perdonaría no hacerlo, pero en un futuro me gustaría acabar los estudios', dice mientras observa la trayectoria de los gigantes de este deporte, encabezados por el propio Woods.
Sus compañeros de juego, Olazábal y García, le han dicho que esté tranquilo: 'Jugar con ellos me ayudará. ¡No quiero ni imaginar cómo será mi primer golpe!'. La presión que se siente en el tee del 1 es brutal y más aún cuando representa el debut en un torneo del Grand Slam. 'Estará lleno de gente. A pesar de que no serán ni las ocho de la mañana hay que tener presente que diez minutos más tarde, justo por detrás nuestro, saldrá a jugar Tiger Woods'.
Cuando se les pregunta a los organizadores el porqué de un grupo con los tres españoles, afirman que 'el ordenador funciona bien'. Hablan de casualidad, pero más bien ha existido una intencionalidad que, ojalá, represente una ventaja. '¡Al menos no tendremos que cambiar de idioma!', aunque hablarán en inglés con sus respectivos caddies: dos estadounidenses y un sudafricano, el de García. Lo que suceda en el campo es una incógnita. Ni Sergio García ni Olazábal llegan en el mejor momento de juego. Aunque ambos pasaron el corte en el St. Jude Classic de Memphis, donde Martín se quedó fuera por un golpe, tuvieron una actuación que no pasó de discreta.
En cualquier caso, cuando se indaga en busca de un posible favorito en el torneo el primer nombre que aparece es el de Tiger Woods.