Delphi perdona 150 millones de deuda a su filial española
Delphi empezó a concretar ayer las cesiones industriales a las que está dispuesta para mitigar su marcha de Puerto Real (Cádiz). La multinacional ofreció al comité las dos plantas de rodamientos, una de las divisiones consideradas rentables, y prometió condonar hasta 150 millones de euros en deudas de empresas del grupo.
La segunda reunión entre Delphi y el comité de empresa para negociar el expediente de extinción de 1.600 empleos presentado en Puerto Real y su plan social de acompañamiento arrojó ayer unos primeros resultados alentadores para la resolución de la crisis, aunque la negociación continuará el próximo viernes.
El presidente del comité de empresa, Antonio Pina, informó de que durante la reunión la empresa les comunicó su disposición a ceder partes de los activos y condonar una deuda de 150 millones de euros que tiene pendiente con las empresas del grupo. En concreto, Pina indicó que la empresa les comunicó su disposición a dejar la planta 41 y la planta de NDH (las dos de rodamientos). Se trata de una de las divisiones que se considera rentable dentro de las instalaciones gaditanas.
El representante de los trabajadores manifestó que lo ofertado por la empresa está 'bien', pero advirtió que 'ahora necesitamos cartera de clientes y vías comerciales', en cuanto 'a quien va a ocupar el terreno, las maquinaria y la fábrica y qué es lo que va a fabricar y para quien. Porque si no tenemos nadie que haga eso, para qué queremos una fábrica muerta'.
Estos detalles serán objeto de próximas reuniones. Empresas y representantes de trabajadores se volvieron a emplazar para el próximo viernes, donde Delphi deberá de explicarle a los representantes de los empleados las diferentes cuestiones planteadas por éstos en cuanto a cartera de clientes y vías comerciales.
Los resultados de esta segunda reunión contrastan con el fracaso cosechado en el primer encuentro, que fue tildado por el comité de 'pantomima'.
El avance en la negociación entre empresa y trabajadores se suma a los resultados que también se están logrando en la búsqueda de nuevas empresas que absorban los empleos que se verán destruidos por el cierre de Delphi. Por el momento se ha confirmado el desembarco de Sadiel, González Byass y Génesis Solar, aunque la Junta admite ya que mantiene negociaciones con la catalana Ficosa para que reconvierta la planta automovilística. En este caso, será fundamental las cesiones de activos que finalmente realice Delphi.
La Junta mantiene negociaciones con un grupo de empresas y todavía no está cerrado ni el número de firmas implicadas ni la ubicación de las mismas. Algunas de ellas ocuparán la planta de Delphi y los terrenos aledaños adquiridos por la Junta, mientras que las demás se instalarán en otros puntos de la Bahía de Cádiz o en el futuro parque tecnológico de Las Aletas. Este último es el caso por ejemplo de la vasca Afer, que operará en la comarca con una fábrica de casas prefabricadas que aportará más de 1.000 puestos de trabajo.
La bodega González Byass, con un proyecto de bioetanol, aseguró ayer que 'aún no ha definido su localización exacta', por lo que 'continúa estudiando ubicaciones' en la Bahía de Cádiz, una prudencia exigida 'por la inversión y envergadura' del proyecto.
Vitelcom sigue esperando soluciones
Mientras la crisis de Delphi avanza en su solución, la plantilla de la firma malagueña Vitelcom continúa sin ver la salida. Los empleados de la empresa de telefonía móvil 'siguen a la espera' de que se inicie el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que se aprobó el pasado 23 de mayo, tras haber entregado toda la documentación necesaria para el mismo. Este expediente permitirá que 250 trabajadores puedan recibir el desempleo durante un periodo de seis meses y otros 46 empleados se quedarán en la fábrica para encargarse del mantenimiento de la misma 'y ponerla a punto'. Según indicaron fuentes sindicales, el comité está a la espera de que se inicie el ERTE 'para poder distribuir a los empleados en las diferentes tareas'. Por el momento, los casi 300 trabajadores afectados acuden a la fábrica todos los días, aunque continúan sin carga de trabajo a la espera de que el Juzgado de lo Mercantil remita el ERTE a la Inspección de Trabajo para que emita una resolución.