Economía apura la negociación con los grupos parlamentarios sobre el techo de gasto
La víspera del debate sobre el techo de gasto del Estado para el año que viene, el vicepresidente económico, Pedro Solbes, empieza a percibir que el apoyo parlamentario del que dispone para encarar los Presupuestos de 2008 es bastante más estrecho que en otros ejercicios, en puertas de las elecciones generales. El PSOE apurará hasta el último minuto la negociación con los diferentes partidos, pero ayer sólo contaba con el respaldo explícito del PNV y Coalición Canaria.
Los socios habituales del Gobierno en esta legislatura le abandonarán mañana en la votación del acuerdo que establece en 152.561 millones de euros el techo de gasto para el año que viene. Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) e Izquierda Unida (IU) anunciaron ayer su abstención por motivos diferentes. En el caso ERC, porque el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, no se ha comprometido a aplicar con mayor generosidad la disposición tercera del Estatuto catalán, que obliga al Estado a destinar el 18% de la inversión pública a Cataluña.
En el caso de IU, porque la coalición ya tiene la mirada puesta en las elecciones generales y se propone iniciar un distanciamiento táctico del Gobierno de aquí al final de la legislatura. Convergència i Unió, cuyo apoyo al Gobierno ha ido por épocas y leyes puntuales, también anunció ayer su abstención en la votación de mañana, para no ser menos que ERC y preservar su espacio electoral. El PSOE desplegó ayer por la tarde todas sus armas de seducción para reconducir estas actitudes y sumar a alguno de estos grupos al consenso.
Si la situación no cambia, Economía sólo contará con los apoyos del PSOE (164 diputados), PNV (siete) y Coalición Canaria (tres) para sacar adelante el techo de gasto de 2008, lo que augura una votación muy ajustada cuyo resultado final dependerá de las ausencias que se registren en cada grupo parlamentario.
Los problemas para aprobar el techo de gasto anticipan los que vendrán cuando llegue el momento de negociar el Presupuesto de 2008
Además, los nacionalistas vascos han dejado claro al Grupo Socialista que su apoyo al techo de gasto no anticipa su respaldo a los Presupuestos del año que viene. Si ERC, CiU e IU se distancian del Gobierno en la antesala de las elecciones generales, el valor del PNV como socio aumentará y también, como es lógico, el precio que pondrá a su respaldo parlamentario. Por esta razón es muy probable que para apoyar las cuentas del Estado del año que viene los nacionalistas vascos pongan como condición al vicepresidente económico que despeje de una vez por todas el contencioso sobre el cupo, es decir el volumen de dinero que el Ejecutivo vasco debe pagar al Estado por las competencias que este último ejerce en la comunidad autónoma. El lendakari Juan José Ibarretxe se ha negado a abonarlo en los últimos ejercicios a raíz de la negativa del Gobierno central a responsabilizarse de una parte del gasto sanitario en Euskadi.
Las dificultades que está encontrando el Ministerio de Economía para reunir los apoyos suficientes para aprobar en el Congreso el techo de gasto son la antesala de los problemas que encarará Pedro Solbes para dar cobertura a las cuentas del año que viene con un respaldo parlamentario amplio. Para mañana, ni siquiera cuenta con el apoyo del Bloque Nacionalista Gallego, a pesar de que gobierna en coalición con el PSOE en Galicia y en numerosos ayuntamientos de esta comunidad.
El conflicto generado por la interpretación de la disposición adicional tercera del Estatuto catalán, sobre el que ERC y CiU hacen descansar su negativa a respaldar el techo de gasto, sacudió también la discusión presupuestaria del año pasado. Las inversiones territorializadas en infraestructuras para Cataluña recogidas en los Presupuestos de este año ascienden a 3.195 millones de euros.
El Ministerio de Economía defiende que esta cuantía respeta lo dispuesto en el Estatuto de autonomía, pero el cálculo que hacen los nacionalistas y los republicanos catalanes difiere del que hace el secretario de Estado de Hacienda.
Marco fiscal para las pymes
CiU se apuntó ayer un tanto en la Comisión de Economía del Congreso al ver aprobada por unanimidad una proposición no de ley que insta al Gobierno a simplificar las nuevas obligaciones fiscales que, según la nueva ley contra el fraude, deben cumplir las pequeñas y medianas empresas (pymes).La iniciativa que ayer defendió con éxito CiU reclama que se exima a las pymes y a las microempresas de la obligación de preparar de forma forzosa la documentación sobre sus operaciones vinculadas para remitirla a Hacienda.Esta obligación, que supone documentar que el precio de adquisición por el que se han registrado contablemente estas operaciones se corresponde con el valor del mercado, supone una carga de gestión administrativa y económica para este tejido empresarial, expuso el diputado nacionalista Josep Sánchez Llibre.El diputado del PP Francisco Utrera apoyó esta proposición no de ley, aunque vaticinó que tendrá escasa eficacia ya que está terminándose de elaborar en el Ministerio de Economía el nuevo reglamento del impuesto sobre sociedades.
El frente catalán
Esquerra Republicana de Cataluña acogió ayer favorablemente la invitación del líder de CiU, Artur Mas, para formar un frente común que 'plante cara en Madrid', y que giraría en torno al rechazo de los partidos catalanes de los Presupuestos de 2008.