Iguales en trabajo, iguales en mala salud
Hasta no hace mucho tiempo los españoles se morían de infarto, EPOC (Enfermedad Obstructiva Crónica), cáncer de pulmón y cáncer de próstata. Ellas, sin embargo, fallecían de derrame cerebral y de cáncer de mama.
Las cosas están cambiando. La isquemia coronaria, el infarto de miocardio, está empezando a hacer mella entre las mujeres; también el cáncer de pulmón: en Estados Unidos éste ha crecido un 600% en los últimos años, y en España provocó en 2005 (último registro) 2.468 defunciones femeninas, un 1,4% más que un año antes. Eso sí, ellos son más proclives al suicidio (se registran 3.300 casos globales al año), siguen muriendo más en la carretera, registran más casos de sida (el 79,5%), tienen más sobrepeso (44,2% de los varones) y beben y consumen drogas con más frecuencia.
La enfermedad todavía distingue de sexos, pero cada vez menos. La progresiva incorporación de la mujer al mercado de trabajo (la tasa de actividad se acerca ya al 50% en nuestro país) y, sobre todo, su adicción al tabaco están detrás del cambio de patrón que los médicos vaticinan para la próxima década. Ellas todavía tienen una mayor esperanza de vida (72,4 años frente a 69), la pregunta es: ¿hasta cuándo?
La enfermedad todavía distingue de sexos, pero lo hace cada vez menos
El consumo de tabaco ha sido tradicionalmente un rol masculino, pero en la actualidad las mujeres fuman más, y entre los 16 y los 24 años superan en porcentaje a los varones (34% frente a 32%), según datos facilitados por el doctor César Minué, de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria. El consumo femenino está aumentado en todas las clases sociales, pero sobre todo entre las privilegiadas, donde el número de profesionales es mayor. Las mujeres fuman como distintivo de independencia y sofisticación, pero también porque el tabaco ayuda controlar el peso: quita el apetito y tiene efectos lipolíticos.
La Sociedad Española de Cardiología observa con preocupación este cambio de tendencia, según explica el doctor Javier Escanet, secretario general de la SEC. Entre otras razones, porque hay indicios ciertos que demuestran que la mujer y los propios médicos piensan que ellas son menos vulnerables al infarto que el hombre, y por tanto, cuando éste aparece se diagnostica mal y se controla o previene con técnicas terapéuticas inadecuadas.
Parece que los estrógenos previenen a las mujeres jóvenes frente a la isquemia coronaria, aunque hay estudios que afirman lo contrario; pero también hay investigaciones que demuestran que la mujer diabética, una patología muy ligada a los nuevos estilos de vida, es más proclive a sufrir un ataque que un hombre diabético. En cualquier caso, el objetivo de los cardiólogos es corregir esta situación de desprotección femenina con la mayor brevedad.
Un problema añadido es el estrés. Dicen los expertos que las mujeres también están cambiando su forma de reaccionar ante la emoción. Las jóvenes ejecutivas o profesionales empiezan a reaccionar frente al estrés de la misma manera que lo hace el hombre, con una mayor respuesta fisiológica mientras contienen la emoción. Esto tiene su correlato médico y son cada vez más las mujeres con enfermedades cardiacas.
En cambio, el cáncer colorrectal afecta casi por igual a hombres y mujeres. Es el segundo en importancia en los hombres, detrás del de pulmón, y en las mujeres, detrás del de mama. Pero la supervivencia a los cinco años es del 53% en hombres y del 55% en mujeres.
Hombres y mujeres: diferencias en formación, renta y responsabilidad
Poder y decisión.El 25,53% de los concejales son ya concejalas y el 37,7% de los parlamentarios son mujeres. Sin embargo, sólo el 3,69% de los consejeros de empresas del Ibex 35 son féminas. Y solo hay una mujer presidenta, Ana Patricia Botín, que dirige Banesto, según datos facilitados ayer por el INE en el estudio Hombres y Mujeres 2007.
Familia y maternidad. La edad media de la maternidad se sitúa actualmente en los 30,9 años. En todas las comunidades autónomas supera los 30 años. La tasa de fecundidad es de 1,52. Grecia e Italia están por debajo. El número de hijos fuera del matrimonio ha pasado del 2% en 1975 al 27% en la actualidad. El 6% de los hombres viven solos y el 8% de las mujeres.
Formación. El nivel de formación actual de la población femenina es todavía inferior al masculino. La mayoría de la población española no supera la educación secundaria, sólo el 22,65% de los hombres va a la universidad y el 21,55% de las mujeres. Ellas siguen siendo mayoría en los grupos analfabetos y educación primaria, prácticamente iguales en enseñanza universitaria y son minoritarias en secundaria. Ellas prefieren Humanidades y Ciencias Sociales ellos, Ciencias de la Naturaleza y la Salud.
Renta. Los ingresos anuales medios de las mujeres perceptoras de ingresos son inferiores a los de los hombres. En el 2004, el ingreso anual medio de las mujeres ascendía a 9.215,8 euros, un 66% del de los hombres, que ascendían a 13.897,9 euros.