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Finanzas

Casi la mitad de los presidentes de las cajas han pasado por la política

Casi la mitad de los presidentes de las cajas (20 de los 45) han pasado por la política. Muchos de ellos han ostentado diferentes cargos en Gobiernos municipales y autonómicos antes de dar el salto a las finanzas. Entre ellos destacan Narcís Serra, ex ministro de Defensa y actual presidente de Caixa Catalunya, y Juan Pedro Hernández-Moltó, ex diputado socialista y ahora máximo responsable de Caja Castilla-La Mancha.

La Ley Financiera, aprobada a finales de 2002, ha conseguido reducir en parte las injerencias políticas en la gestión de las cajas, pero las reminiscencias del pasado aún abundan dentro del sector. Esta normativa limitó al 50% el peso de los partidos en los órganos de gobierno de las entidades (consejo y asamblea) e impuso la irrevocabilidad de los mandatos. Unas medidas que no han impedido que la cúpula de casi la mitad de las cajas todavía luzca tintes políticos.

De los 45 presidentes actuales, 20 han mantenido algún tipo de relación con partidos, ya sea ocupando diferentes cargos públicos o accediendo a su puesto en las entidades gracias a su proximidad a algunos dirigentes.

Cantera socialista

El caso más llamativo es el de Miguel Sanz, que preside el Ejecutivo regional y Caja Navarra

Los casos más llamativos son los de Narcís Serra, de Caixa Catalunya, que antes de ser nombrado presidente de la cuarta caja española desempeñó distintas posiciones en gobiernos socialistas. Fue alcalde de Barcelona, ministro de Defensa y vicepresidente del Gobierno en las dos últimas legislaturas del PSOE liderado por Felipe González.

Tras diez años en la vida parlamentaria dentro de las filas socialistas, Juan Pedro Hernández-Moltó también fue designado máximo responsable de Caja Castilla-La Mancha (CCM), cargo que ostenta desde finales de 1999.

Pero, sin duda, la situación más peculiar es la de Miguel Sanz, que compagina su puesto como presidente del Ejecutivo regional de Navarra, en representación de UPN, con el de número uno de la única caja de esta comunidad.

José Luis Olivas, presidente de Bancaja, arrastraba un carrera pública antes de incorporarse a la caja valenciana. Fundador de la antigua Unión de Centro Democrático (UCD), fue dentro del PP donde cosechó sus mayores logros políticos hasta llegar a ocupar la presidencia de la Generalitat Valenciana.

La lista no termina ahí. Jesús Medina, máximo responsable de Caja Extremadura desde 1991, ha sido uno de los más estrechos colaboradores de Emilio Rodríguez Ibarra, presidente de esta comunidad autónoma hasta las últimas elecciones. Con Ibarra, su principal valedor, formó parte del Ejecutivo autonómico extremeño como consejero de la presidencia.

Mauro Varela (Caixa Galicia), José Luis Ros (Caja Guadalajara) y Feliciano Blázquez (Caja Ávila) son otros de los hombres que cambiaron sus escaños de diputados por el sillón de presidentes en sus respectivas entidades.

Blázquez, uno de los mentores del ex presidente del Gobierno, José María Aznar, sustituyó en el puesto a otra persona fuerte dentro del PP, Sebastián González.

Los consistorios municipales han sido otra buena cantera para las entidades. José Antonio Arcos Moya, máximo responsable de Caja Jaén, fue alcalde socialista de Andújar durante muchos años. En Burgos, José María Arribas Moral, ahora presidente de la Municipal de Burgos, ejerció como teniente de alcalde del Ayuntamiento y procurador durante dos legislaturas del PP. Arcadi Calzada, de Caixa Sabadell, pasó de ser presidente de la Diputación de Gerona a ocupar después la alcaldía de Olot y la vicepresidencia primera del parlamento de esta autonomía. Otro catalán, Joan Contijoch (Caixa Manlleu) ha sido regidor del Ayuntamiento de Manlleu y conseller del consejo comarcal de Osona.

En Andalucía, Antonio María Claret, presidente de Caja Granada, formó parte de la comisión ejecutiva del PSOE andaluz. Braulio Medel (Unicaja) también ha sido viceconsejero de Economía y Hacienda de la Junta de Andalucía. Dentro de esta misma comunidad, Antonio Pulido, nuevo presidente de Cajasol, resultado de la fusión de San Fernando y El Monte, presume de ser desde muy joven militante socialista. En su currículum figuran, entre otros cargos, la jefatura del gabinete del consejero de Educación en 1988.

Estrechos lazos personales

No estar afiliado a ningún partido no garantiza la inexistencia de fuertes lazos con determinadas ideologías o representantes políticos. Carlos Etxepare, que ocupa la presidencia de la vasca Kutxa, no tiene carné ni del Partido Nacionalista Vasco ni de Eusko Alkartasuna (EA) y, sin embargo, ha trabajado con ambos partidos colaborando en la gestión del área del tributaria en varios gobiernos forales de Guipúzcoa. Ha sido director de presupuestos y de Hacienda y consejero técnico tanto del diputado de Hacienda como del departamento de calidad.También son conocidos los lazos que unen a Rafael Soriano, máximo responsable de Caixa Ontinyent, con Eduardo Zaplana, actual portavoz del Partido Popular en el Congreso de los Diputados.En el caso de Miguel Blesa, presidente de Caja Madrid, él mismo ha reconocido su estrecha amistad con el ex presidente del Gobierno popular, José María Aznar. Aun así, Blesa tampoco está afiliado al Partido Popular.

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