Máximo de seis años del real brasileño
La moneda brasileña dio ayer un paso más en su apreciación frente al dólar y superó la barrera de las dos unidades por cada billete verde por primera vez en seis años. Así, el real se cambió a 1,98 dólares, reforzado por un ligero dato de inflación estadounidense que mitigó el temor a nuevas subidas de tipos de interés en la principal economía del mundo y que podrían provocar la salida de capitales desde los mercados emergentes.
El real ha subido el 6% en lo que va de año frente al dólar, para disgusto de las compañías exportadoras brasileñas y, en especial, de las que fabrican ropa y calzado y sufren con más intensidad la competencia de los productos importados de China. El Banco Central brasileño ha intentado enfriar el ascenso de la divisa y ha intervenido casi todos los días en el mercado con la compra de dólares pero el propio presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, reconocía ayer que 'no hay un milagro' para contener el fortalecimiento del real. Insistía además en que la debilidad del dólar es un fenómeno global y destacaba que los buenos fundamentos de la economía brasileña están atrayendo por sí mismos a los inversores.
Caída del Bovespa
A pesar de que la Bolsa brasileña cotizó durante la mayor parte del día por encima de su precio de apertura, terminó la jornada en negativo. El índice Bovespa cayó un 0,10%. Aun así, acumula un crecimiento anual del 13,46%.
Atentos a
¦bull; La agencia de calificación financiera Fitch enfrió ayer la expectativa de que la deuda de Brasil sea elevada a grado de inversión en el próximo año, después de elevar el rating la semana pasada a un grado por debajo de inversión, a 'BB+' desde 'BB'.