CEOE pide menos impuestos y más cesión de suelo para reactivar la industria

La patronal CEOE va a pedir al Gobierno una serie de incentivos para reactivar la industria y que este sector sustituya a la construcción como motor de la economía española. Demandan una rebaja del impuesto de sociedades o más cesión de suelo.

La Comisión de Industria de la patronal CEOE está elaborando un documento de propuestas para el Gobierno, en el que le proponen que establezca una batería de incentivos para reactivar el sector industrial en España.

El presidente de esta comisión y de la patronal de la industria del metal (Confemetal), Andrés Sánchez de Apellániz, ha explicado que este documento tiene vocación de impulsar la industria 'para que tome el relevo de la construcción' e impulse el cambio del patrón de crecimiento de la economía española, para que ésta sea más productiva.

Los empresarios de este sector están satisfechos con el crecimiento de la industria -que avanzó un 4,5% en el primer trimestre y un 6,7% el sector del metal- pero creen que es el momento de que el Gobierno establezca nuevos incentivos para 'aprovechar el buen momento que nos está empezando a proporcionar el tirón de la recuperación alemana', dijo el responsable de Confemetal.

Entre la batería de propuestas, los empresarios del sector industrial consideran que no es suficiente la última rebaja del impuesto de sociedades, en vigor desde 1 de enero, y reclaman al Gobierno un mayor abaratamiento de este tributo.

Asimismo, Sánchez de Apellániz denunció que 'en muchas partes de España empieza a faltar suelo industrial'. De ahí que el documento también recoja incentivos a la cesión de suelo para el establecimiento de industrias.

Según explicó, este factor está provocando 'deslocalizaciones industriales dentro de España'. Es el caso de la fuga de empresas de Madrid hacia las zonas castellanomanchegas como La Sagra y Guadalajara, donde hay más suelo industrial y más barato.

El documento que prepara la CEOE, y que se entregará al Gobierno en los próximos meses, incluye también un viejo reproche patronal: la falta de unidad de mercado como efecto de la disparidad normativa de las autonomías. En concreto, una de las mayores quejas de las empresas industriales se refiere a la existencia de numerosas leyes medioambientales diferentes en cada comunidad.

Es más, los responsables patronales aseguran que 'las tarifas y los requisitos son diferentes en cada pueblo o ciudad'. Esto dificulta enormemente la actividad de una empresa con varias plantas en distintas partes de España, asegura Sánchez de Apellániz. En su opinión, debería ser el Ministerio de Industria el que coordinara esta disparidad normativa.

Entre las peticiones al Gobierno recogidas por este documento está otro grupo relacionado con el I+D+i y la formación. La patronal considera 'imprescindibles' ayudas que fomenten la relación entre los investigadores y la industria y, sobre todo mejorar las relaciones entre la universidad y las empresas.

'Lo que llega de las universidades y de la Formación Profesional está muy lejos de las necesidades de la industria, y eso sólo lo puede mejorar la Administración', dice el dirigente de Confemetal.

'Vamos a salir al extranjero a formar trabajadores'

Los responsables de la patronal del metal tienen encima de sus mesas varias peticiones de empresas del sector para participar en los programas del Ministerio de Trabajo de formación de trabajadores en origen. 'Vamos a salir al exterior a formar a los trabajadores porque tenemos mucha escasez de mano de obra cualificada como soldadores o matriceros', indican en Confemetal. Se trata de puestos cuyos salarios oscilan entre 1.500 y 2.000 euros mensuales y que no se cubren, lo que, en muchos casos, impide incluso la expansión de las empresas. Este problema, es mayor en zonas donde ya hay pleno empleo, como el eje del Ebro, Valencia, Madrid, Murcia y Castilla y León.No obstante, estos responsables tienen también dificultades para participar en estos programas porque la ley exige que las empresas contraten al 60% de los trabajadores que se formen en sus países de origen y encuentran complicado conseguir empresas que den formación de calidad en esos países.