Telefónica cierra su macroplán de ajuste en España con 14.350 bajas desde 2003
Hoy se cierra el último plazo de un plan de ajuste que se ha prolongado por cinco años y que concluye con la salida de más de 14.350 trabajadores de la filial de Telefónica en España. En su ejercicio final de 2007 las solicitudes de adhesión al ERE superan las 1.600, lo que deja la cifra definitiva de bajas algo por debajo de la previsión inicial. Por ello, no se descarta un extensión.
Hace poco más de diez años, la filial de telefonía fija nacional de Telefónica rozaba los 70.000 empleados. A final de este ejercicio estará por debajo de los 29.000 trabajadores, la plantilla que hace cinco años fue definida como el tamaño perfecto para el nuevo entorno de competencia en el que debía sobrevivir el ex monopolio. Para conseguirlo, Telefónica puso en marcha en 2003 un severo plan de ajuste, con el objetivo de reducir 15.000 puestos de trabajo hasta el cierre de 2007. Hoy concluye este programa. Los trabajadores dejarán la empresa de forma gradual a lo largo de este ejercicio, pero la última jornada del último plazo para apuntarse al expediente de regulación de empleo (ERE) de Telefónica en España está a unas horas de terminar.
Según los datos proporcionados por la operadora a los sindicatos, las solicitudes de adhesión para dejar Telefónica en 2007 sumaban 1.600 cuando quedaban tres días para la finalización del plazo.
Las cifras definitivas no se conocerán hasta que se cierre el proceso, se recuenten y se den por buenas las peticiones, pero con los datos preliminares en la mano es muy posible que el número de bajas total quede por debajo de las 15.000 previstas en 2003.
Según cifras oficiales proporcionadas ayer por Telefónica, en los dos primeros años del ERE dejaron la empresa 7.500 trabajadores, a los que se sumaron otros 1.945 empleados en 2005. Durante el año pasado, la compañía cambió la estructura tradicional y estableció dos periodos para apuntarse al ajuste, que se saldaron con 1.542 y 1.762 peticiones, respectivamente. A estos números se añaden ahora las más de 1.600 solicitudes de adhesión del presente ejercicio, lo que lleva la cifra total durante cinco años al entorno de las 14.350 bajas, unas 650 por debajo de la meta inicial.
Más plazo para adhesiones
De hecho, el responsable de Telefónica España aseguró en la conferencia con analistas posterior a la presentación de los resultados anuales de la operadora, el pasado mes de marzo, que el objetivo de bajas para 2007 se elevaba a 2.200 trabajadores e incluso cifró el coste que esperaban para estas salidas: 630 millones de euros.
Los fondos, por tanto, están ya reservados, así que fuentes sindicales no descartan que Telefónica decida prolongar el proceso o proponer un nuevo plazo para apurar al máximo las adhesiones de personas que quieran salir de la empresa este año. No se trataría de aumentar los despidos o las prejubilaciones, sino de alargar la vida del ERE en el tiempo con los mismos parámetros.
Telefónica prefirió ayer esperar a los datos definitivos para hacer una valoración, aunque confió en cumplir el expediente de regulación e incluso superar los objetivos iniciales. También descartó que estén previstos cambios en el plan de ajuste.
Los sindicatos, sin embargo, han pedido ya una reunión con la compañía para debatir los datos definitivos del ajuste y para exigir que se cumplan los compromisos de creación de empleo del plan social asociado al expediente de regulación en marcha, según fuentes de UGT.
A pesar de lo abultado de las cifras, la reducción de plantilla de Telefónica y su estructura actual está a años luz de la mayoría de sus homólogas europeas, sobre todo de Deutsche Telekom y de France Télécom. La alemana tiene en marcha un plan para reducir 32.000 empleos y su plantilla asciende a 248.480 trabajadores, la mayoría de ellos en su país de origen y ligados a un negocio, el de telefonía fija, muy afectado por la competencia y con márgenes decrecientes. Telefónica contaba con 227.137 empleados a cierre de 2006, con buena parte de ellos fuera de las fronteras españolas. France Télécom, por su parte, anunció a principios del año pasado un programa para eliminar 22.000 puestos de trabajo hasta 2008.
La opa sobre Cantv comenzará el 9 de abril
Telefónica está a punto de recibir 110 millones de euros por una participación que, por momentos, dio por perdida. Se trata del 6,9% que tiene en el capital del ex monopolio de telecomunicaciones de Venezuela, Cantv.El Gobierno de ese país aprobó la nacionalización de la operadora. Después de un conflictos con su principal propietaria, la estadounidense Verizon, el Ejecutivo de Hugo Chávez acordó pagar a esta firma un precio por la expropiación, pero nada dijo del resto de los accionistas. Después se supo de la intención de lanzar una opa por el resto del capital, pero la operación se ha estado retrasando. Finalmente, ayer se confirmó que la opa comenzará el 9 de abril. Reportará 110 millones a Telefónica.