Locales modernos, económicos y de diseño

Los restaurantes 'casual dining' son una tendencia al alza en las grandes ciudades

Puro cosmopolitismo. De París a Nueva York, pasando por Sidney o Estambul, triunfa una manera de comer informal en la que interesa más la estética que la gastronomía, las formas que el fondo. Es una tendencia cada vez más de moda en todas las grandes ciudades del mundo, que ocupa buena parte de las páginas life style de las publicaciones de moda. Necesariamente hay que referirse a ellos por su término anglosajón, conocido también como cheap & chic -algo así como barato y molón-, ya que es en este ámbito donde surgieron y desde donde se han ido extendido por todo el planeta.

No es raro que estos establecimientos estén diseñados por interioristas y arquitectos célebres, desde el internacional Phillipe Stark a Ignacio García de Vinuesa, Tomás Alía o Teresa Sapey, en el caso de los españoles. Ambientes modernos, vanguardistas, a la última, vajilllas y cristalerías de diseño, platos de estética cuidada, bodegas con pocas pero escogidas etiquetas de actualidad a precios comedidos, cartas de aguas, de tés y cafés, y, a menudo, espacios polivalentes donde es posible tapear, tomarse una copa o un cóctel con el Dj de moda o comer de menú a precios razonables son características propias de estos restaurantes cada vez más habituales en las grandes urbes. Desde luego no responden a las exigencias de los gastrónomos, porque en ellos se busca, sobre todo, la imagen. Suelen decantarse por una cocina de fusión internacional, donde se puede tomar noodles (los conocidos fideos chinos), sushis, ensaladas mediterráneas, arroces, pasta italiana, woks de verduras, dim sum o recetas más o menos tradicionales puestas al día. Cuenta, y mucho, la presentación, tanto como el espacio, los modernos camareros vestidos ad hoc, y la propia clientela del restaurante: guapa y fashion. La calidad de la materia prima no es primordial. Habitualmente responde a la restauración de quinta gama (platos preparados en cocinas centrales que se terminan en el propio restaurante) lo que permite jugar con menús a precios fijos, sobre todo al mediodía. Comer o cenar en estos locales no suele sobrepasar los 25-30 euros, con propuestas a la hora de almorzar que pueden rondar los 15 euros de media.

Ofertas como éstas se dan en todas las ciudades. Desde luego Madrid y Barcelona acaparan el ranking en España, que ya se extiende a lugares como Valencia o Bilbao, pero es una tendencia imparable. Frecuentados por gente joven y ejecutivos, se localizan en zonas céntricas, de mucha actividad comercial, de oficinas, y al mediodía sustituyen a los alternativos menús y casas de comidas. Son la competencia actual y creciente a una comida sin complicaciones, que se nutre de las modas urbanas. No es para sibaritas ni gourmets, pero cumple las expectativas de una cocina informal, a buenos precios y en lugares concebidos para ver y ser visto.

Para sibaritas

Pagos del Camino 2004, garnacha riojano. Bodegas Bretón marcó en los años noventa un nuevo estilo en los tintos de la Denominación de Origen Rioja. Fundada en 1983, fue precisamente en la última década del siglo pasado cuando sacó al mercado el Dominio de Conté, uno de los primeros riojas que respondía al concepto de los llamados vinos de pago, una elaboración que marcó pautas en la moderna viticultura de la zona. En realidad la bodega afincada en Navarrete, a las afueras de Logroño, comenzó a comercializar sus productos bajo la marca Loriñón, que en estos más de 20 años se ha incrementado con nuevas etiquetas.Su gama de vinos pasa por los citados Loriñón (blanco fermentado en barrica, crianza, reserva y gran reserva) y Dominio de Conté (tempranillo y graciano), el Alba de Bretón (exclusivamente de tempranillo) y el Pagos del Camino, un tinto 100% de garnacha vieja con 12 meses de crianza. Esta uva que se cultiva en distintas zonas vitivinícolas, se suele utilizar en ensamblajes para dar estructura a los vinos, aunque en determinadas DO, como la Rioja, se emplea en la elaboración de monovarietales. En su añada 2004 Pagos del Camino presenta una nariz no muy intensa pero marcada por la fruta madura y los tonos minerales y balsámicos. De cuerpo medio en boca, es ligeramente dulce en el ataque, vivo, frutal, con buena acidez y con un tanino algo secante. Final no muy amplio. Precio: 24 euros.

Menús urbanitas

Mezklum. Príncipe, 16. Madrid. Tel.: [phone]. Menús: 12 y 16 euros.Mercado de la Reina. Gran Vía, 12. Madrid. Tel.: [phone]. Menú: 12 euros.The Grill Club. Jorge Juan, 8 y otros locales en Chueca y Malasaña. Madrid. Tel.: [phone]. Precio medio: entre 13 y 16 euros.Okra. Fernando el Santo, 26. Madrid. Tel.: [phone]. Menú: 16 euros.Wagaboo. Ayala, 14 y otros locales en Chueca y La Moraleja. Madrid. Tel.: [phone]. Diversos menús entre 10,50 y 14 euros.With Love. Alcalá, 90. Madrid. Tel.: [phone]. Tres menús a 11,90 euros.Soya & Oliva. Avda. de la Ermita, esquina Avda. Olimpiada. San Sebastián de los Reyes (Madrid). Tel.: [phone]. Menús: 14 y 15 euros.Telirium. Flos i Calçat, 18. Barcelona. Tel.: [phone]. Menú: 10,59 euros.BBrb. Pº de Gracia, 28. Barcelona. Tel.: [phone]. Menú: 10,27 euros.Kikara. Iparaguirre, 234. Bilbao. Tel.: [phone]. Menús: 13, 15 y 30 euros.La Lola. Subida de Toledo, 8. Valencia. Tel.: [phone]. Menú: 15 euros.