Construcción e industria mantienen su fortaleza, según el Banco de España
El año se ha iniciado como acabó 2006, con buenas perspectivas para la economía española. Es el diagnóstico que acaba de realizar el Banco de España en su último boletín de coyuntura, hecho público ayer. La entidad supervisora, que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez, detecta los máximos puntos de dinamismo en la evolución de la industria y la construcción.
Respecto de la primera, se hace eco de que la utilización de la capacidad productiva industrial ha alcanzado un 81,2% en este primer trimestre, lo que supone el valor máximo desde 1989.
'Ello sugiere que la inversión en bienes de equipo podría seguir manteniendo su dinamismo. La disminución del saldo de empresas en la industria que considera que su capacidad instalada es excesiva también apunta en la misma dirección', se recalca en el informe.
La recuperación de la industria en 2006 (sobre todo los bienes de equipo) ha sido uno de los puntales que ha permitido que el crecimiento económico español escale hasta el 3,9% el pasado año, la mejor tasa desde 2000 y más de un punto por encima de la media comunitaria.
En cuanto a la construcción, el Banco de España destaca la favorable evolución en enero de los indicadores de empleo en el sector, con incrementos de la afiliación a la Seguridad Social y caídas del paro registrado.
Además, el consumo de cemento ha comenzado el año con un 'notable ritmo de crecimiento'. Los indicadores de carácter adelantado (en particular, los visados de obra) 'anticipan el mantenimiento de un tono de fortaleza de la inversión en construcción en los próximos meses'. No obstante, la propia entidad avisa de que los datos de los que se dispone para este año aún son prematuros como para hacer un diagnóstico fiable de la evolución de la economía española en su conjunto.
La entidad insiste en la necesidad de un crecimiento económico más equilibrado. En la actualidad se basa en la demanda interna, con una contribución negativa del sector, consecuencia de un incipiente déficit comercial, que no acaba de mitigarse.
Por otro lado, el Banco de España aconseja prudencia en el crecimiento de los salarios, algo que, más o menos, se está produciendo. De hecho, en enero el aumento salarial pactado en los convenios colectivos fue del 2,8%, similar al que se fijó en el mismo mes de 2006. Los trabajadores afectados por estos conveníos superan los tres millones, 500.000 menos que hace un año por estas fechas.