El presidente de Audi se muestra dispuesto a fabricar en Martorell
El nuevo presidente de Audi, Rupert Stadler, abrió ayer la puerta a que Seat asuma la fabricación de un modelo de Audi en las instalaciones de Martorell, tras la reestructuración del grupo de marcas en VW.
Estaría encantado de fabricar algún producto en Martorell, dado que así habría más competencia dentro del grupo, pero esto no es posible por ahora por motivos de capacidad', declaró durante la presentación anual de resultados en la sede de Ingolstadt, cerca de Múnich. Audi planea expandir su gama en los próximos años, para lo cual necesitará más capacidad de producción. La fábrica catalana fue candidata a fabricar el nuevo A1, pero éste se fabricará finalmente en las instalaciones de Volkswagen en Bruselas.
Stadler, en cualquier caso, eludió pronunciarse sobre Seat, marca que ha dejado de estar bajo el paraguas del grupo Audi. Respecto a esta desvinculación, el ejecutivo indicó que la decisión de disolver los grupos de marcas se ha tomado en el seno del consorcio Volkswagen, en Wolfsburgo. 'Cada enseña asume más responsabilidad en objetivos comerciales y en resultados', agregó.
El directivo, que ocupó cargos en la filial española de Volkswagen y Audi, también usó el turno de preguntas para arremeter contra la Unión Europa y su intención de limitar las emisiones de CO2 a 130 gramos por kilómetro recorrido. 'Audi nunca cumplirá estas exigencias de la Comisión', aseguró. 'No se puede contradecir a la física'. Stadler apuntó que si Audi, Mercedes y BMW retiraran del mercado sus 50 modelos más vendidos, las emisiones de CO2 bajarían sólo en 1,5 gramos, pero eso 'destrozaría a la industria' y afectaría a miles de puestos de trabajo. Además, destacó que el desarrollo de tecnologías poco contaminantes exige tiempo. 'Se tarda siete años en el desarrollo, y no somos David Copperfield', concluyó. Stadler se mostró muy sarcástico al referirse a esta cuestión. 'Supongo que no nos quieren fastidiar desde Bruselas', añadió. 'El asunto de las emisiones contaminantes debe abordarse desde con un enfoque integrado, no sólo desde el medioambiental, también desde el industrial, el social o el económico'.
La compañía, por otra parte, obtuvo el pasado año un beneficio neto de 1.343 millones de euros, lo que supone un aumento del 63% en relación con el ejercicio, anunció Stadler. El directivo destacó que Audi cerró 2006 con máximos históricos de ganancias, ingresos y ventas, al tiempo que avanzó que la marca se ha fijado como objetivo superar el millón de unidades vendidas en todo el mundo en 2008 y alcanzar 1,5 millones de unidades en 2015. La cifra de negocio se elevó a 31.100 millones, el 17,1% más.