El Eurogrupo pide más equilibrio entre beneficios y salarios
Los ministros de Economía de la zona euro alertaron ayer, por primera vez desde el comienzo de la Unión monetaria en 1999, sobre los riesgos de una contención salarial excesiva. Bruselas cree que el desequilibrio actual entre salarios y beneficios empresariales resulta insostenible.
Salarios demasiado bajos y beneficios empresariales demasiado altos. Ese parece ser uno de los problemas de la economía de la zona euro. Y el diagnóstico no lo ha hecho ninguna organización sindical, sino los ministros de Economía de la zona Euro (Eurogrupo), bajo presidencia alemana desde el pasado 1 de enero.
'Si la clase media o, incluso, las clases más desfavorecidas, pierden poder adquisitivo mientras se incrementan exponencialmente los beneficios de las empresas, la economía social de mercado queda en entredicho y pierde su legitimidad'. El autor de la proclama no es otro que el ministro alemán de Finanzas y presidente del Eurogrupo durante este semestre, Peer Steinbrück, al término de la reunión del consejo de la UE celebrada ayer en Bruselas.
Pero Berlín (o, más bien, el ala socialdemócrata del gobierno de coalición a la que pertenece Steinbrück) no está sola. Otros ministros del Eurogrupo comparten su preocupación por el impacto en el consumo interno de casi una década de contención salarial. Y el comisario europeo de Economía, Joaquín Almunia, llegó ayer a calificar de 'insostenible' el modelo actual. 'Estamos en una situación en la que la participación salarial en los ingresos generales de los Estados miembros es la más baja de los últimos años. Yo no creo que esta situación sea sostenible', advirtió el comisario.
Hasta ahora, los ministros de la zona euro habían secundado las incesantes llamadas del Banco Central Europeo a favor de la prudencia sindical en las negociaciones salariales. Se trataba, aseguraban, de una premisa imprescindible para continuar disfrutando unos tipos de interés en niveles históricamente bajos.
Pero las tornas han cambiado desde que Alemania, país que, según los expertos, ha utilizado la pérdida de poder adquisitivo de sus trabajadores como revulsivo para mejorar su competitividad, se enfrenta a demandas de incrementos salariales de hasta el 6,5%. 'En Alemania hay un debate sobre como repartir los beneficios', reconoció Steinbrück.
Solbes considera positiva la moderación
El reequilibrio entre salarios y beneficios empresariales podría pasar de largo por España. Los datos de la Comisión Europea indican que durante el periodo 1999-2005, la 'compensación por trabajador aumentó un 3% anual en España, mientras que la productividad laboral sólo creció un 0,4%'. En el mismo periodo, los costes laborales en el mercado español crecieron un 2,6%.Y como recordó el comisario de Economía, Joaquín Almunia, los incrementos salariales deben ir ligados a aumentos de productividad. 'Y en España hay sectores que no han crecido', señaló. El ministro de Economía, Pedro Solbes, valoró la clara moderación salarial que se ha mantenido en España y calificó de 'ejemplar' la actitud mantenida durante años por los sindicatos.