Trabajo revisará cada cuatro años los logros de la Ley de Igualdad
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, aseguró ayer durante su intervención en el Foro del Pequeño Accionista organizado por IESE e Inforpress, que el ministerio tiene la intención de vigilar el grado de cumplimiento de la Ley de Igualdad que previsiblemente se aprobará en el Congreso en un mes. Uno de los objetivos de la futura norma es conseguir que de aquí a ocho años la presencia de las mujeres en los consejos de administración de las empresas españolas llegue al 40%. En la actualidad ni siquiera alcanza el 4%.
'Se hará una evaluación de la norma cada cuatro años. Y en la primera revisión cuatrienal nos pensaremos si hay que adoptar otro tipo de decisiones de tipo obligatorio para lograr los objetivos de la ley como ya han hecho otros países, como Suecia o Noruega', afirmó Caldera.
El ministro señaló que la Ley de Igualdad es, según las encuestas del CIS, la norma que más apoyo social ha suscitado (el 93%) en los últimos 25 años y envió a las empresas el mensaje de que la nueva ley no pretende que se abandonen los principios de mérito y capacidad ni que prescindan de la productividad. 'No. Les animamos a que apliquen estos principios sin que se vean enturbiados por el sexo de las personas'.
La intervención del ministro Caldera estuvo precedida por la del presidente de la CNMV, Manuel Conthe, quien recordó que el Código Unificado no contiene la previsión de alcanzar cuotas, pero sí contiene la recomendación de que las sociedades cotizadas que no cuenten con mujeres en el consejo lo analicen y lo expliquen. Conthe se mostró a favor de las políticas de incentivos para lograr la presencia de mujeres en los consejos.
Caldera liga igualdad y productividad
El ministro afirmó ayer durante su intervención en el almuerzo de trabajo organizado por IESE e Inforpress sobre Mujeres y Consejos de administración que el que haya más mujeres en las empresas no es una carga sino un elemento de productividad. Caldera afirmó que si las mujeres se quedan al margen del mercado laboral no se podrían alcanzar los objetivos de Lisboa. Explicó que la presencia de la mujer en el empleo supone aprovechar mejor el capital humano y que las mujeres directivas mejoran el clima laboral y aumentan la motivación de la plantilla.