El detector de mentiras llega a las entrevistas de empleo
Algunos países emplean el polígrafo para seleccionar altos directivos, aunque se duda de su fiabilidad
Una jungla de famosillos se pasea cada tarde por Antena 3 y Tele 5 para confesar, conectados a la máquina de la verdad, sus interesantes confesiones. El último boom televisivo español no parece haber llegado hasta Rusia, pero esta semana las autoridades de Moscú sorprendían a los especialistas en recursos humanos al anunciar que preparan un proyecto de ley para regularizar el uso del polígrafo o detector de mentiras en las entrevistas de empleo, según informa Efe.
'Hemos llegado a la conclusión de que sería útil redactar una ley así', explicó a la prensa el diputado Valeri Sháposhnikov al final de una reunión de la comisión de Recursos Humanos de la Asamblea Legislativa de Moscú (Mosgorduma). Estos legisladores no han contado como asesores con ningún director de contenidos de una televisión española, sino a los mucho más cinematográficos servicios secretos rusos. El mismo diputado explicó que la Asamblea ha invitado a participar en la redacción de la ley a expertos del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB, ex KGB).
'Yo jamás lo usaría. Ni me lo planteo. La fiabilidad del polígrafo es muy relativa. En las entrevistas de trabajo, donde por la propia situación los entrevistados están muy nerviosos, no serviría para nada', asegura Helena Thomas, profesora de psicología de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Esta máquina supuestamente mide, a través de unos sensores, si una persona miente a través de sus respuestas fisiológicas. Pero en España los tribunales lo rechazan en los procesos judiciales y según explica Thomas, ella no conoce que ninguna empresa lo utilice en los procesos de selección.
Yuri Jolodni, catedrático de la Academia del FSB, señaló que en Rusia, al igual que en otros países, numerosas compañías ya aplican la prueba del polígrafo a los solicitantes de empleo, pero que esa práctica carece por ahora de una base legal. Agregó que ya se realizan cada año más de 45.000 pruebas con el detector de mentiras, sobre todo para los aspirantes a altos cargos directivos en grandes compañías que temen ser objeto del espionaje industrial por parte de la competencia.
'No entiendo para que se podría utilizar como no sea para conocer la capacidad del entrevistado para mentir', comenta con cierta incredulidad Nuria González, consultora de Cátenon, empresa especialista en la selección de directivos. Esta compañía utiliza un medio tecnológico más corriente en sus entrevistas: el vídeo. De forma consentida graban algunas respuestas de los aspirantes a las preguntas pactadas con el cliente. 'A las empresas les interesa saber cómo reaccionan sus posibles empleados ante determinadas preguntas y los candidatos aprovechan que tienen una cámara delante para venderse', explica.
El experto del ex KGB cree que el uso del polígrafo en la selección de recursos humanos no esta reñido con la Constitución rusa por cuanto ese es un 'método voluntario' y queda a expensas del solicitante aceptar las consecuencias de su decisión. Pero se plantean dudas legales. Siempre debería ser usado con el consentimiento del aspirante. ¿Pero si se niega? Probablemente le sitúe en peores condiciones para conseguir el empleo.