Imperial Tobacco compra CBHC, el cuarto fabricante de cigarrillos de EE UU
Pagará 1.475 millones en efectivoLa tabacalera británica Imperial Tobacco ha adquirido CBHC, el cuarto fabricante de cigarrillos de EE UU, que opera bajo la marca Commonwealth Brands. Pagará 1.475 millones de euros. Es la primera tabacalera europea que entra en el mercado estadounidense en más de una década.
Desde hace meses se esperaba que Imperial Tobacco realizase un movimiento en el proceso de concentración del sector, y ya lo ha dado. La británica comunicó ayer la adquisición de la estadounidense CBHC, que opera bajo la marca Commonwealth Brands. Una operación que podría alejar los rumores que apuntaban una inminente compra de la hispano-francesa Altadis, que ayer se apuntó una caída en Bolsa del 3,81%.
La adquisición del cuarto mayor fabricante de cigarrillos estadounidense, es la primera que realiza una tabacalera europea en ese país en más de una década, aunque Commonwealth Brands también opera en Puerto Rico. Gracias a ella, Imperial Tobacco controlará el 3,7% del mercado más rentable del mundo, que alcanza los 376.000 millones de cigarrillos. De hecho, EE UU se convertirá en el tercer mercado de la compañía por detrás del Reino Unido y Alemania. Según el comunicado de Imperial, Commonwealth produce actualmente 14.000 millones de unidades, pero tendría capacidad para fabricar 30.000 cigarrillos al año.
Imperial pagará a Houchens Industries, actual propietaria de CBHC un total de 974 millones de libras en efectivos (unos 1.475 millones de euros). Sin embargo, la tabacalera reduce el coste neto de la operación hasta los 769 millones de libras (1.160 millones de euros) gracias a los beneficios fiscales. El fabricante de marcas como West o Golden Virginia señala que espera cerrar la operación el próximo mes de abril.
El consejero delegado de Imperial Tobacco, Gareth Davis, aseguró que la adquisición responde al interés de la compañía de entrar en el mercado estadounidense a través de una operación 'de bajo riesgo'. 'Commonwealth Brands es un negocio tremendo y joven que nos aportará un acceso inmediato y significativo al mercado de tabaco más rentable', afirma Davis. La compra 'nos aporta una creciente plataforma operativa desde la que podremos lanzar rápidamente nuestras marcas propias de alta calidad'.
Además, el directivo de Imperial destacó que con esta compra evitan los costes asociados a la entrada orgánica en EE UU, que la compañía estimaba en 20 millones de euros anuales. Davis no sólo destaca la importancia del mercado de cigarrillos en EE UU, también la creciente venta de otros formatos de tabaco y de papel para fumar. 'Creemos que estamos muy bien posicionados para tomar ventaja en el crecimiento de estos sectores', señalaba el consejero delegado.
En el último ejercicio, finalizado el pasado 30 de septiembre, los ingresos antes de impuestos e intereses de Commonwealth Brands crecieron un 15% hasta 164 millones de dólares (126 millones de euros).
Un mercado restringido por los pleitos judiciales
Hasta ahora las tabacaleras europeas parecían evitar su entrada en el mercado norteamericano, principalmente por las posibles complicaciones legales, ante los pleitos judiciales presentados en los últimos años. Commonwealth se ha enfrentado a tres demandas por la responsabilidad de sus productos, aunque no ha perdido ninguna, ni ha sido nombrada en acciones colectivas. Tampoco ha sido acusada por el Departamento de Justicia. Imperial Tobacco destaca que Commonwealth cumple todos las restricciones publicitarias. Además, señala que fue la primera tabacalera que firmó voluntariamente el Master Settlement Agreement (MSA), el acuerdo por el que las compañías se comprometían a pagar a los Estados indemnizaciones por los costes relacionados con el tabaquismo.