CC OO recela de las ayudas a empresas para formar inmigrantes en sus países
El sindicato Comisiones Obreras ha exigido una reunión con los responsables del Ministerio de Trabajo para que éstos expliquen a los representantes sindicales las lagunas que, según CC OO, tiene la orden ministerial que regula las nuevas ayudas que recibirán las empresas para formar a trabajadores inmigrantes en sus países de origen.
El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó el pasado 6 de febrero la Orden Ministerial que regulará estas ayudas. Según el texto, 'las empresas o asociaciones' que soliciten estas subvenciones deberán adquirir el compromiso de contratar al 60% del total de trabajadores que formen en el país de origen.
Estas ayudas estarán destinadas para financiar los cursos de formación que podrán impartirse a través de empresas locales del país en cuestión. Los cursos serán gratuitos y los alumnos serán seleccionados por las Embajadas o consejerías de Trabajo, si existen en el país. La supervisión de los cursos será a cargo del Servicio Público de Empleo, que podrá delegarlo en las embajadas y consulados.
No obstante, los responsables de CC OO ven muchos puntos negros en esta orden ministerial. En primer lugar, están estudiando si la vía de financiación escogida por Trabajo es legal, ya que, según la Orden Ministerial, los cursos se encuadran dentro del Plan Nacional de Formación e Inserción Profesional, a través de la formación ocupacional para desempleados. La duda es si el dinero de las cotizaciones destinado a formar desempleados en España puede usarse para financiar estos cursos.
La Orden Ministerial precisa también que las Comunidades Autónomas recibirán información 'sobre el contingente de trabajadores extranjeros susceptibles de contratación, previa a la formación en sus países de origen'. Pero en CC OO consideran que esta referencia al contingente es ambigua porque no se sabe si se refiere al cupo nacional o a uno específico para esta nueva vía de contratación.
Asimismo, los responsables sindicales consideran que la norma debería acotar mejor la necesidad de precisar cuántos trabajadores podrán entrar por estar vía, siempre teniendo en cuenta el resto: cupo, profesiones de difícil cobertura, arraigo y reagrupamiento familiar.