Babcock ajustará su plantilla aun sin acuerdo sindical
Babcock Power España (BPE), la antigua Babcock Wilcox, será desde mañana una empresa plenamente privada, que podrá seguir su andadura sin la tutela de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), tras el vencimiento del plan industrial al que se comprometió el comprador, A-Tec Industries, con el holding público español.
El problema es que la nueva etapa probablemente se inicie sin acuerdo entre los directivos de BPE y su matriz austriaca con los sindicatos para aplicar el plan de empresa previsto para los próximos dos años, que exige un recorte de plantilla del 20% (80 trabajadores) para asegurar la viabilidad de la empresa.
En cualquier caso, los nuevos propietarios lo tienen claro. 'Si finalmente no hay acuerdo, A-Tec tiene la obligación y el derecho de actuar como una compañía privada, con una posible reducción de plantilla y todos los derechos sobre la propiedad para asegurar su futuro industrial, de acuerdo con los requerimientos legales', advirtió en un comunicado.
Los representantes de UGT y CC OO tratan de llegar a un acuerdo con la compañía en el que también participe la SEPI, a la que reclaman que amplíe las garantías sociolaborales previstas en el plan que vence hoy durante cinco años más. El resto de sindicatos rechaza al grupo austriaco como interlocutor creíble. La SEPI, que no prevé reunirse con las centrales 'a corto plazo', recordó ayer que su única labor es de intermediación.