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Aeronáutica

EADS anuncia que su filial Airbus entró en pérdidas en 2006

El grupo se plantea un recorte laboral en España

Airbus perdió en 2006 por primera vez en seis años la batalla por el dominio mundial de la aviación comercial ante su rival estadounidense Boeing. La grave crisis que atraviesa la compañía por los retrasos de más de dos años en la entrega del gigante A-380 se saldará probablemente con pérdidas para la principal filial de EADS, según dijo ayer el consorcio. La Bolsa castigó el anuncio con una caída del 2,69% en Madrid y el 2,84% en París.

'Los retrasos del A-380 han supuesto un verdadero shock para nuestros clientes, nuestros proveedores y para el mercado financiero. Trabajamos para que esto no se vuelva a producir'. Louis Gallois, presidente de Airbus, se esforzó ayer junto a toda la cúpula de la principal filial del consorcio aeronáutico EADS por trasladar un mensaje de confianza después del que seguramente haya sido el peor año de la compañía desde su creación en 1970.

Los retrasos en la entrega del que quiere ser el avión más grande del mundo, el baile de presidentes en sólo unos meses y la dimisión de Noel Forgëard, presidente de la matriz, por supuesto abuso de información privilegiada, han minado la confianza.

Una serie de varapalos que se han saldado, en primer lugar, con la pérdida del liderazgo de la aviación comercial mundial de Airbus a favor de su rival Boeing. La victoria de esta batalla, cifrada en el número de pedidos finales, fue en 2006 para el constructor estadounidense, con un total de 1.044 entregas, frente a 790 de Airbus.

Gallois quiso, no obstante, tildar de 'excelente' el ejercicio 2006, por el número de entregas, que ascendieron a 434 aparatos, un récord que dará a la compañía 26.000 millones de euros de ingresos. La cuota de mercado del constructor europeo fue del 43%, frente al 57% de Boeing.

Además, en 2006 'probablemente' Airbus presentará un resultado de explotación (Ebit) negativo, a causa de gastos por compensaciones a determinados clientes, la depreciación de activos o el impacto financiero de Power8, el plan de reestructuración ideado por Airbus para sacar del marasmo a la empresa. Power 8 supondrá una enorme reorganización industrial, 'difícil, pero justa y equitativa', según el constructor.

Aunque los detalles no se conocerán hasta el mes próximo, la prensa gala avanza que la estrategia apunta, en primer lugar, a mejorar la productividad en los cuatro países del grupo, Francia, Alemania, Reino Unido y España, una mejora que incluirá recortes laborales. Además, se intentará racionalizar los equipos informáticos y llevar las funciones administrativas a la matriz. Por último, se intentará reducir el plazo de construcción de los aviones.

La compañía baraja además la posibilidad de una ampliación de capital, que podría dar entrada a nuevos accionistas, decisión que se tomará de aquí a la celebración de la junta, en mayo. 'La tesorería del grupo se mantiene fuerte pero hay que reforzar la base, así que no descartamos recurrir al mercado', dijeron directivos.

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