De rebajas por Londres, París y Nueva York
Las grandes capitales ofrecen sustanciosos descuentos
Cuando en 1894 los londinenses acudieron en masa a las rebajas de los almacenes Harrods no lo hicieron atraídos sólo por los precios. El gran imán que reunió en aquellas fechas a una enorme muchedumbre fue la presentación de las primeras escaleras eléctricas que se instalaron en el centro. Tan grande fue la expectación, que los empleados de Harrods esperaban en lo alto de la escalera la llegada de los clientes con un vaso de brandy a modo de tranquilizante.
Más de 100 años después, el reclamo para iniciar las rebajas de los almacenes ha sido la actriz estadounidense Eva Longoria. Longoria inauguró el pasado 28 de diciembre la temporada de descuentos de invierno que se prolongará todo el mes de enero. En sí mismas, las rebajas de Harrods justifican una escapada a Londres (lo saben bien en Gucci, donde la semana pasada los empleados del stand de la firma distribuían agobiados tickets con número en un intento de organizar la avalancha de compradores), pero la ciudad ofrece bastante más. Por ejemplo, los descuentos que durante todo este mes exhibe BirdCage (8 Upper St Martins Lane), la exquisita tienda de Anna Hui donde se puede encontrar ropa de mujer de inspiración oriental, delicada bisutería y unas velas únicas. O la oportunidad de saquear (también hasta final de enero) la boutique de Paul Smith -en el 40-44 de Floral Street- y llenar el armario con el más puro estilo british a un precio mucho menor de lo habitual. Las amantes de los zapatos no pueden dejar de pasar por Kate Kuba (22 Duke of York Square, King's Road), una de las zapaterías más trendy de la ciudad.
Para los aficionados a los almacenes, tanto Liberty (210-220 Regent Street) como Selfbridges (400 Oxford Street) están también de rebajas. El primero ofrece descuentos a partir del 30% y supone una buena ocasión para hacerse con algo de su colección de muebles vintage o de sus espléndidas alfombras.
Los amantes del chic galo pueden optar por París, donde las rebajas de invierno suelen durar seis semanas. Almacenes como Galerías Lafayette y Printemps ofrecen descuentos estos días de hasta el 50%, mientras que en Le Bon Marché las rebajas comenzarán el día 10. Imprescindible darse una vuelta por la Rue Saint Honoré, donde junto a las grandes firmas de lujo no se puede dejar de entrar en Colette, uno de las paradas fijas de cualquier gurú del estilo. A lo largo y ancho de sus tres pisos, la tienda ofrece descuentos de hasta el 50% en la multitud de productos que vende: desde música, arte o comida hasta cosmética, moda y decoración.
Para quiénes hayan dejado reservados unos días de vacaciones Nueva York ofrece multitud de oportunidades y descuentos. En los lujosos almacenes Barneys se ofrecen descuentos del 20% al 50%, mientras que en Bloomingdale's el porcentaje ronda el 30% y en Saks Fifth Avenue llega al 70%. Entre las numerosas boutiques que ofrecen descuentos no hay que dejar pasar Joseph, con varias tiendas en la ciudad, (los descuentos llegan al 90%); Nicole Miller (en Madison Av. Green St. y Spring St.) que ofrece su colección de otoño un 70% más barata y las tiendas de Issey Miyake con descuentos del 40% en hombre y mujer. Y recuerde: un euro vale, 1,3 dólares.
Consejos para comprar con la ley en la mano
Como ya es habitual por estas fechas, las asociaciones de consumidores han advertido a los compradores españoles que las rebajas que se inician este mes en España sólo se aplican a los precios, no a sus derechos. Como recordaba el viernes la Unión de Consumidores de España (UCE), la rebajas deben durar 'obligatoriamente' entre una semana y dos meses, (aunque es competencia de las autonomías marcar el principio y el final de las mismas). También es importante recordar que no se consideran rebajas los productos que no hayan estado a la venta en el comercio con anterioridad y, finalmente, que para que un comercio se enmarque dentro del periodo de rebajas, la reducción de precios debe afectar al 50% de la mercancía. 'Si un establecimiento no cumple estas condiciones, puede y debe ser sancionado', aseguraron fuentes de la UCE. En cuanto a la devolución de productos, hay que tener en cuenta que los comercios no están obligados a devolver un producto si no es defectuoso o la devolución se debe a un cambio de opinión del consumidor. Lo correcto, según UCE, es advertir al vendedor cuando se va a comprar un regalo y asegurarse de que no habrá problemas a la hora de cambiarlo. En los establecimientos que se anuncian frases como Si no queda satisfecho le devolvemos su dinero tienen la obligación de aceptar los cambios, ya que así lo publicitan.