'Entraremos en los seguros para coches'

Este malagueño, de 57 años y formación jurídica, ha desarrollado su carrera profesional en Barclays Bank. Con su llegada a la filial española de la entidad Caixa Geral, el banco ha dado un golpe de timón a su estrategia de crecimiento

El crecimiento orgánico se ha convertido en la obsesión de Manuel López Figueroa. Desde que fue designado como consejero delegado de Banco Simeón (llamado Banco Caixa Geral desde hace seis meses), la entidad ha abandonado la política de crecimiento a base de compras para apostar por la apertura de oficinas. Su plan de expansión prevé duplicar el número de sucursales antes de 2010.

¿Por qué el grupo Caixa Geral de Depósitos (CGD) ha pasado de una política de adquisiciones a buscar el crecimiento orgánico?

Los responsables de Caixa Geral tenían claro que crecer era España era ineludible y se optó por hacerlo vía adquisiciones: con el Banco de Extremadura, el Luso Español y el Simeón. Estas entidades tenían poca cuota de mercado y una implantación geográfica limitada, por lo que el grupo siguió buscando oportunidades. Llegó a pujar, aunque sin éxito, por Banco Madrid, el Zaragozano y el Atlántico. Esta política de expansión a través de compras llevó a Caixa Geral a descuidar mucho el crecimiento orgánico, y eso es lo que estamos tratando de cambiar.

¿Esta estrategia implica que no realizarán más compras?

Como cualquier banco, estamos atentos a posibles ofertas, pero han cambiado las prioridades y, ahora, lo fundamental es el crecimiento orgánico.

¿En qué medidas se ha concretado el cambio de rumbo?

El grupo sigue confiando en la filial española. Ha desembolsado 275 millones de euros para una ampliación de capital y se ha puesto en marcha un plan estratégico que contempla la apertura de 140 oficinas hasta 2010. Para 2007 hay previstas 18 aperturas en Madrid y en el arco mediterráneo. Por ahora, el proyecto está funcionando y hemos cerrado 2006 con cerca de 600.000 euros de beneficios, frente a los 31 millones de pérdidas de un año atrás.

¿Que líneas de negocio tienen previsto potenciar más?

Queremos crecer en banca minorista, en pymes y banca corporativa. También queremos ser la entidad de referencia para las empresas que trabajan en España y Portugal. Además, vamos a apostar por la bancaseguros. Hasta ahora, hemos conseguido multiplicar casi por tres el volumen de primas emitidas, y en 2007 vamos comenzaremos a ofrecer seguros para automóviles.

¿Y la banca privada?

Daremos servicios exclusivos a clientes con un patrimonio superior a los 300.000 euros, para lo que estamos desarrollando una unidad especializada. Partiremos de un equipo de entre 20 y 25 personas que centraran su trabajo tan sólo en ciertas zonas y oficinas.

¿No es demasiado ambicioso tratar de llegar a tantos segmentos con la dimensión de Banco Caixa Geral?

Probablemente, pero nuestra vocación es ofrecer toda la gama de servicios bancarios. No queremos renunciar a nada. Nos lanzamos a todas las líneas de negocio y después nos iremos enfocando en las más rentables. Queremos replicar la estrategia del Caixa Geral en Portugal. Aún así, la política es muy diferente por regiones. En Extremadura y Galicia, donde tenemos mayor presencia, hacemos banca universal, mientras que en las nuevas plazas donde estamos abriendo oficinas nos concentramos en banca minorista y para pymes.

Cuando Caixa Geral pujó por el Atlántico arreciaron las críticas por su condición de banco público. ¿Podrían tener problemas con Bruselas?

CGD es un banco de derecho privado con la singularidad de que su único accionista es el Estado portugués. Cuando compite con el resto de entidades lo hace en condiciones de igualdad. Buen ejemplo de ello es que no consiguió quedarse con el Atlántico. La gestión se hace de forma independiente y con criterios estrictamente profesionales. En España extraña este modelo bancario porque ya no existe, pero en Alemania sigue siendo común. En mi opinión, el modelo jurídico de las cajas es más problemático porque en sus órganos de gobierno están presentes, de forma indirecta, los partidos políticos.

¿Qué opinión les merece el registro de las instalaciones de banco Espírito Santo, a raíz una operación contra el blanqueo de dinero?

Es un asunto que está en los tribunales, sobre el que no nos podemos pronunciar, aunque es evidente que la intervención policial daña la imagen del sector.

Transformar tres bancos en uno solo

Uno de los retos más importantes que ha afrontado Manuel López Figueroa desde su llegada a Caixa Geral es el proceso de unificación de las tres entidades con que operaban. El grupo luso llegó a España en 1991 con la compra de Banco de Extremadura y la filial del Chase Manhattan (que pasó a denominarse Banco Luso Español). En 1995 realizó una adquisición de mayor calado: el Banco Simeón. El grupo portugués mantenía una política corporativa y comercial distinta en cada entidad. 'Lograr que tres bancos que funcionaban de manera independiente actúen como uno sólo ha sido complejo, pero lo hemos logrado', comenta López Figueroa. Uno de los desafíos ha sido concentrar en Madrid los servicios centrales, que antes también estaban en Badajoz y Vigo. Entre las piedras que han aparecido en el camino está la renovación del sistema informático que estaba 'muy retrasado' respecto al de sus competidores. Este tipo de operaciones de concentración no son una novedad para López Figueroa: 'en Barclays viví varios procesos de compra, entre ellos la del Zaragozano, y hay muchos factores que se repiten con Banco Caixa Geral: implantar un cultura corporativa única, unificar los productos e integración de las plataformas tecnológicas'.