Las firmas de cosmética miran hacia Extremo Oriente
El Corte Inglés introduce en España la marca líder en el mercado japonés, SK-II. Mientras, L'Oréal obtiene el 10% de sus ventas en el mercado asiático
El lejano oriente ha despertado el interés de las grandes multinacionales de la cosmética. No sólo han descubierto el creciente potencial de los mercados asiáticos, sino que además traen a Europa las marcas con más éxito en ese continente. Es el caso de la enseña SK-II, que acaba de llegar a España de la mano de El Corte Inglés. El gigante español de la distribución ha llegado a un acuerdo con la multinacional Procter & Gamble (P&G) para comercializar, en exclusiva, la marca líder en Japón, Malasia y Hong Kong.
SK-II deriva de la expresión Secret Key o ingrediente secreto: la pitera. Se trata de un líquido transparente extraído durante la fermentación de un tipo de levadura de arroz. Fue descubierta por un monje japonés tras comprobar que los trabajadores más ancianos de una destilería de sake, pese a tener el rostro envejecido, mantenían joven la piel de sus manos.
La implantación de la enseña se llevará a cabo en 14 centros comerciales y ya se encuentra en 11 establecimientos, entre ellos, Goya, Princesa y Serrano en Madrid, Plaza de Cataluña en Barcelona, Nervión en Sevilla y Zaragoza. El gran lanzamiento se realizará en marzo, después de la resaca navideña y las rebajas. 'Más que un acuerdo de exclusividad es un proyecto conjunto con P&G', asegura el director de compra de perfumería y cosmética selectiva de El Corte Inglés, Carlos Pujana. Un acuerdo similar al que tiene SK-II con la cadena estadounidense Saks.
La marca nipona compite dentro del segmento de gama alta, ya que sus precios oscilan entre los 45 y los 175 euros, señala la responsable de relaciones externas de SK-II en P&G, Belén Carazo.
Los corners (o rincones) ocuparán un espacio de entre 20 y 30 metros cuadrados. 'La atención al cliente requiere un espacio mínimo', apunta Carazo, quien resalta la importancia de los tratamientos 'rituales' que se realizan en el establecimiento. La implantación de la marca conllevará 'una gran inversión', reconoce Carazo, tanto por el montaje de las instalaciones como por la formación de entre 60 y 70 empleadas.
Aunque aún no se ha presentado la enseña de manera oficial, ambas compañías apuntan que está siendo bien recibida por los consumidores. 'El objetivo es convertir SK-II en una marca líder del segmento de cosmética facial de lujo en un periodo de entre dos y tres años', reconoce la responsable de P&G.
Mientras, otro gigante de la cosmética, el grupo galo L'Oréal, ve como el auge del mercado asiático se refleja en sus ventas en la región, que se incrementaron un 8,8% durante los nueve primeros meses de 2006 hasta 1.092 millones de euros. Una cifra que representa, aproximadamente, el 10% de su facturación total. En China, octavo mercado mundial en venta de cosméticos, L'Oréal ha adquirido en los últimos años la enseña para el cuidado de la piel Mininurse y la de maquillaje Yue-Sai, convirtiéndose en el segundo grupo cosmético del gigante asiático. Además, en 2005 creó el centro de investigación de Pudong, donde se estudian las características de la piel y el cabello chino para desarrollar productos específicos. La compañía cuenta con un centro similar en la localidad japonesa de Kanagawa.
Las asiáticas utilizan 21 productos; las europeas, sólo 7
Que el mercado asiático cobra cada vez más importancia se refleja en el consumo de productos cosméticos por persona. Mientras las asiáticas, principalmente en las grandes urbes, utilizan 21 referencias diarias, las europeas tan sólo consumen siete, según los estudios de L'Oréal. El grupo francés analiza los hábitos de uso en cada zona para adaptar los productos a las necesidades de cada etnia.De esta manera, las asiáticas se aplican, cada día, base de maquillaje, fondo, corrector, colorete, lápiz de cejas, sombra de ojos, eyeliner, máscara de pestañas, perfilador de labios, barra de labios y brillo, entre otros. A los que se suman el desmaquillante de ojos, las lociones limpiadoras, tónicos, el tratamiento para el contorno ojos y las cremas de día y de noche. Las europeas no sólo utilizan menos productos, sino que además dedican menos tiempo. Según la multinacional, cada europea emplea entre cinco y 10 minutos en el cuidado diario, mientas que en Japón y Corea se llegan a dedicar 25 minutos.